Los españoles eligen Valencia como destino turístico nacional. Cada año aumenta el número de viajeros nacionales que reservan un hotel de 4 estrellas en Valencia y dedican varios días de sus vacaciones a descubrir una ciudad que lo tiene todo.
Gastronomía, historia, museos, opciones de sol y playa… La tercera capital española en tamaño mantiene una oferta rica que se adapta a diversos perfiles de turistas: familias con niños pequeños, parejas que buscan planes románticos, grupos de amigos o un perfil de adultos jubilados que buscan tranquilidad, comodidad y bienestar.
A esas innumerables posibilidades se suman una excelente estructura de transporte público y una oferta hotelera encabezada por espacios como el Hotel Silken Puerta Valencia.
Estos servicios terminan por redondear una estancia de vacaciones inolvidable con ubicaciones en el centro de la ciudad y condiciones de reserva flexibles.
Atractivos únicos en el país
Más allá del turismo extranjero, Valencia es un lugar idóneo para los ciudadanos que no quieren salir del país en verano por muchos motivos. Los más destacados son algunos de los atractivos únicos que tiene la capital levantina.
Estos son algunos de los planes que entran, sí o sí, en los calendarios de actividad de prácticamente todos los perfiles de personas que llegan a este destino, especialmente en los meses de mayo, junio, julio, agosto y septiembre:
La Ciudad de las artes y de las ciencias
Niños, familias con adolescentes e incluso adultos con curiosidad infinita dedican, al menos, un par de jornadas a disfrutar de todo lo que la Ciudad de las Artes y las Ciencias tiene que ofrecer.
Desde su apertura, en 1998, este complejo de edificios diseñado por Santiago Calatrava recibe, cada año, a dos millones y medio de interesados por la flora, la fauna, el espacio, la ciencia y la tecnología.
Los turistas se reparten entre edificios como el Oceanogràfic, el Museo de la Ciencia, el Hemisfèric y el Palacio de las artes, entre otros, donde existen tanto espacios expositivos permanentes como actividades culturales y artísticas para todos los gustos.
Barrio del Carmen: historia, arquitectura y vida
El Barrio del Carmen, en Valencia, es una zona que parece haber frenado el paso del tiempo. Sus intrincadas calles prometen un paseo laberíntico lleno de historia y que satisface la mirada de los apasionados por la arquitectura.
Edificios cristianos de la edad media y construcciones renacentistas albergan hoy talleres artesanos, pequeños comercios llenos de encanto o lugares majestuosos como la lonja de la seda, que bien merecen un paseo para deleitarse con la grandeza de la ciudad.
Además, pocas cosas hay como olvidarse del tiempo de camino a algunas de las terrazas que abren sus puertas en las plazas del Barrio del Carmen, tomar una horchata o un Agua de Valencia y vencer, así, las suaves temperaturas que ofrece el Mediterráneo.
Top de la gastronomía
Uno de los motivos que mueven a los viajeros a buscar un buen hotel en Valencia, céntrico y bien comunicado, es pasar unos días descubriendo todo lo que la ciudad ofrece a nivel gastronómico.
Valencia es una de las mejores zonas para empaparse de la gastronomía mediterránea. Desde pequeñas tabernas hasta grandes locales de cocina de autor conviven en las calles de la ciudad, lo que hace que muchas personas dediquen varios días a sentarse en las mejores mesas de la región.
Algunos lo hacen desde el excelente desayuno a la carta en el hotel, pasando por el famoso esmozaret y terminando en locales como el de Ricard Camarena, con dos Estrellas Michelin y una Estrella Verde a la creación gastronómica sostenible.
L’Albufera: naturaleza desatada
Un imprescindible para cualquier español que visita Valencia es L’Albufera. Este Parque Natural está conformado en torno a un gran lago de agua dulce pegado al mar y a tan solo diez kilómetros de Valencia capital.
Está conformado por distintos pueblos de origen agricultor dedicados al cultivo del arroz y allí se establece el origen del plato nacional de referencia a nivel mundial: la paella.
Más allá de probar esta receta donde mejor la preparan, L’Albufera permite dar paseos en barca para ver el atardecer sobre el agua, observar las aves migratorias o pasear por las dunas naturales y los extensos bosques de pino que crecen en torno a esta zona de gran riqueza hídrica.
Combinados con otros muchos planes de ocio y tiempo libre, donde baños en playas como El Cabanyal o la Patacona son imprescindibles, estas recomendaciones justifican más que de sobra el hecho de reservar un buen hotel en Valencia y dedicar algunas jornadas a descubrir este paraíso nacional.
En 2024, un 55,4 % de los visitantes que llegaron a la ciudad fueron españoles, lo que demuestra el creciente interés que esta capital levantina tiene para quienes quieren descubrir tesoros turísticos sin salir de sus fronteras: una cifra que no dejará de aumentar en los próximos años, según las previsiones de la propia comunidad autónoma.