En la operación “CALADA” han sido detenidas 6 personas y se han realizado 5 registros domiciliarios en los que se han intervenido 6 armas de fuego, inhibidores de frecuencia, documentación falsificada, uniformes policiales, luces prioritarias, etc.
Asaltaron las oficinas de una empresa en la localidad granadina de Atarfe vestidos con uniformes de policía local y, provistos de armas de fuego, maniataron a los empleados. En esta ocasión tuvieron que huir ante la presencia policial que detectó el robo
La Guardia Civil en el marco de la operación “CALADA” desarrollada en las provincias Madrid, Málaga, Huelva y Toledo, ha detenido a 6 personas de nacionalidad española, integrantes de una peligrosa organización criminal dedicada a la comisión de robos con violencia en naves industriales, oficinas y domicilios, vestidos con uniformes policiales. Se les imputa los delitos de pertenencia a banda organizada, robos con violencia e intimidación, tenencia ilícita de armas, robos con fuerza, usurpación de funciones, atentado y falsificación de documentos.
Se han realizado 5 registros domiciliarios en los que se ha intervenido 1 pistola, 1 revólver, 3 escopetas, 1 rifle y 1 pistola simulada, uniformes policiales, luces prioritarias, bridas y grilletes, con los que cometían los asaltos.
Las investigaciones comenzaron en febrero de este año, tras haberse perpetrado, mediante el procedimiento del butrón, 2 robos en una empresa de la localidad de Viator (Almería) dedicada al almacenaje y distribución de tabaco.
Durante la investigación los agentes pudieron constatar la existencia de una organización que podría estar implicada en la comisión de 25 robos cometidos con violencia e intimidación en diversas empresas y domicilios de Granada, Sevilla, Córdoba, Málaga, Almería, Huelva y Guipúzcoa.
Por ello, la Guardia Civil estableció un dispositivo de seguimiento sobre estas personas, dando como resultado la detención de sus integrantes.
Ocultaban las armas y vestimenta policial en una chimenea
En una vivienda de la aldea de El Rocío (Huelva), la organización planificaba los robos y ocultaba en la chimenea de la casa las armas y vestimenta policial que utilizaba en sus asaltos.
Cuando iban a cometer sus robos, normalmente de noche, la organización sustraía vehículos para sus desplazamientos y el transporte de la mercancía robada, llegando a apropiarse en una ocasión de una retroexcavadora que emplearon para empotrarla contra las paredes de una de las naves asaltadas
Simularon un registro domiciliario con chalecos de Guardia Civil
En uno de los robos cometidos en un caserío de la localidad de Segura (Guipúzcoa), los detenidos se personaron en la vivienda provistos de chalecos identificativos de Guardia Civil, manifestando a los propietarios que iban a realizar un registro por blanqueo de dinero. Tras acceder a la vivienda y maniatar a los moradores, se apropiaron del dinero que había en el domicilio.
Igualmente, en el mes de febrero, dos personas ataviadas con uniformes de policía local se presentaron en las oficinas de una empresa de la localidad de Atarfe (Granada). Tras franquear la puerta, provistos de armas de fuego, maniataron a los empleados. En este asalto, tuvieron que huir del lugar al detectar presencia policial que se aproximaba a la nave.
Cabe destacar la peligrosidad del grupo desmantelado, ya que hacían uso de las armas de fuego si era necesario, como quedó demostrado en marzo cuando cometieron un robo en Huelva y en la huida se enfrentaron a tiros con agentes del Cuerpo Nacional de Policía que habían iniciado su persecución.
Las investigaciones han sido llevadas a cabo por la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil y agentes de las Comandancias del mismo Cuerpo de Almería, Málaga, y Huelva.
Debido a la peligrosidad de los detenidos, en la fase de explotación de la operación se contó con la colaboración de la Unidad Especial de Intervención de Guardia Civil (EUI), especialistas en neutralizar delincuentes altamente peligrosos.