El Péndulo | Redacción.- La cantante y compositora de Detroit Carla Cook, una de las más bellas y versátiles voces actuales de la tradición musical negra norteamericana, vuelve al Jimmy Glass, el martes 21 de julio las 20:45 horas, para cerrar el VII Ciclo de Verano del club, a tres días de su cita en el prestigioso Festival de San Javier.
Especialmente dotada para la improvisación, Cook se entrega en cada uno de sus conciertos, en los que ofrece un potente cóctel de energía y emoción, y exprime su dominio de géneros como el góspel, el blues, el soul o el jazz.
Su repertorio rezuma influencias del R&B, la música clásica europea o el sonido Motown, entre otros, y sus reinterpretaciones de grandes temas de rock o pop como ‘Scarborough Fair’, de Simon & Garfunkel; ‘Inner City Blues’, de Marvin Gaye; ‘Ode to Billie Joe’, de Bobbie Gentry; o ‘Heart of Gold’, de Neil Young, adquieren sabor a jazz cuando pasan por su filtro.
Nominad a los Grammy
La cantante ha sido nominada en diversas ocasiones a los Grammy y en su discografía ha contado con grandes figuras como Cyrus Chestnut, Fred Wesley, Bruce Barth o Regina Carter. El guitarrista Eric Reed ha formado parte de su banda y maestros como Lionel Hampton apadrinaron su carrera.
Su álbum de debut, ‘It’s All About Love’ (1999), recibió el premio Indie AFIM a la Mejor Vocal Jazz un año después. En 2000 grabó ‘Dem Bones’, y en 2002, ‘Simply Natural’.
Acompañan a la vocalista algunos de los músicos más prestigiosos de la escena jazzística española actual. El pianista catalán Albert Bover ha colaborado con músicos de la talla de Sonny Fortune, Art Farmer, Kenny Wheeler, Guy Lafitte o Roy Hargrove, y es también un excelente acompañante de cantantes. Completan el grupo el contrabajista Ignasi González y el batería Jo Krause.
Es nuestra arma para acabar con la impunidad de los más poderosos.
Te necesitamos a ti también para seguir haciendo un periodismo libre de presiones políticas y económicas
Hay mucho trabajo detrás de una noticia. Contrastar fuentes, redactar, analizar, recabar información… Pero todo esto implica unos costes muy altos, porque aunque parezca una obviedad, hacer buen periodismo, en estos momentos, es complicado.