Valencia Noticias | Redacción.- Emivasa ha organizado una cata de agua pública para la Asociación de vecinos de Patraix, en las instalaciones de la ETAP de La Presa de Manises.
Las sesiones del equipo de catas están formadas por 6 catadores que han asistido a la planta potabilizadora la Presa de Manises a cuenta de la empresa organizadora, Global Omnium. Estas jornadas están previstas realizarlas trimestralmente los sábados por la mañana en alguna de las dos salas de catas de las ETAPS (Estaciones de Tratamiento de Agua Potable) de Global Omnium, especialmente diseñadas para su realización. Estas, además de ser lugares tranquilos, confortables, con luz y color de paredes agradables, están libres de olores de otras dependencias.
Procedimiento y objetivo de las sesiones de cata
A lo largo de la mañana, los catadores seleccionados han asistido a una formación previa básica en la planta. Esta se ha basado en una visita por las instalaciones de La Presa de Manises, donde se han explicado cómo se llevan a cabo todas las etapas del proceso de potabilización y una sesión formativa del proceso y el procedimiento del olor y el sabor del agua tratada por las diferentes plantas potabilizadoras de Global Omnium así como de su red de distribución.
Durante la jornada, los catadores valoran las cualidades del agua, y, estas quedan definidas por diversos parámetros tales como; el sabor, el olor, el color, la turbidez y la temperatura. Si bien, estos atributos permiten obtener una opinión objetiva sobre la calidad del agua distribuida.
El objetivo de la sesión es conocer de manera objetiva los olores y los sabores de los diferentes tipos de agua que se suministran en la zona de Valencia para que permitan avanzar en el conocimiento de los sistemas actuales y diseñar las futuras actuaciones de mejora en el sistema de abastecimiento.
En este sentido, el origen de los sabores y los olores en el agua de consumo puede ser muy diverso, desde los producidos por causas naturales (crecimientos de algas azules en la fuente de agua bruta, que puedan liberar compuestos inofensivos para la salud, pero detectables a concentraciones muy bajas o excesiva mineralización del agua), pueden también ser sabores y olores producidos durante el tratamiento del agua (especialmente en los procesos de oxidación-desinfección como la cloración, o el tratamiento con dióxido de cloro), o por último deberse a alteraciones del agua producidas en la red de distribución (al entrar en contacto el agua con diferentes materiales o por reacciones bioquímicas producidas en la red).
En cuanto al procedimiento de la cata, en este caso se ha llevado a cabo un método de cata descriptivo, es decir, queda definido como un análisis de perfil de sabor basado en la cata del agua y la descripción de los sabores y los olores de la misma con sus correspondientes intensidades, en base a una tabla de descriptores codificados que se les ha facilitado. Posteriormente, se definen las sensaciones que les produce la muestra de agua catada. Entre los principales descriptores para los gustos y los olores encontramos: el cloro, la tierra, el desinfectante, el plástico, la cantimplora y la humedad. Respecto a las sensaciones se pueden presentar: sensación áspera, picante y desagradable.
Por último, tras la prueba de todas las muestras, los catadores pusieron en común los resultados.