Por sexto año consecutivo la Diputación de Castellón, en colaboración con la Federació Valenciana de Dolçainers i Tabaleters, llevará la música tradicional de la dolçaina y el tabal a todas las zonas de la provincia a través del Dolç Festival. Esta iniciativa que tiene por objeto fomentar la música tradicional desarrollará ocho conciertos que tendrán lugar hasta el 23 de septiembre. El próximo miércoles, 15 de agosto, tendrá lugar la actuación del Grupo de Dolçaina i Tabal Xarançaina de Castellón en Cortes de Arenoso, en el Alto Mijares.
El vicepresidente provincial y diputado de Cultura, Vicent Sales, ha puesto de manifiesto que “durante estos años la dolçaina, instrumento tradicional imprescindible en nuestras fiestas y celebraciones, ha ganado espacio y ocupa dignamente el lugar que le corresponde, actualmente ya se imparte como instrumento reglado en el Conservatorio Profesional de Música “Mestre Tàrrega” de Castelló. Y todo esto ha sido posible gracias al esfuerzo que han hecho las agrupaciones de dolçainers y tabaleters para mantener vivos los instrumentos más tradicionales y a acciones como ésta que capitanea la Diputación de Castellón”.
Cabe señalar que durante la pasada edición de 2017 más de 2.000 personas disfrutaron de los ocho conciertos celebrados, y durante estos años, ya son 40 las poblaciones de Castellón en las que se ha podido disfrutar de estos eventos, unas previsiones que Sales espera “incluso superar gracias a que ya es una iniciativa conocida y a la gran difusión que le vamos a dar a través de la Agenda provincial en la web dipcas.es”.
Las fechas siguientes a Cortes de Arenoso serán, el 18 de agosto en Chjóvar, el 19 de agosto en Herbés, el 8 de septiembre en Culla y el 23 de septiembre el Figueroles. Ya tuvo lugar el pasado 21 de julio con gran éxito de acogida el primero de los conciertos en San Rafael del Río con pasacalles y concierto a cargo de la Escola de Dolçainers i Tabaleters de Tales.
Impulso de la cultura tradicional como recurso turístico
En su intervención, el vicepresidente Sales ha recalcado el impulso de la Diputación a la dinamización y divulgación de la cultura tradicional, también como recurso turístico.
“Las tradiciones populares de los pueblos son una riqueza que hay que poner en valor y que generan estímulos para el desarrollo cultural y social de sus habitantes. Y esta Diputación Provincial aspira, además, a enfocar sus acciones culturales como motor de impulso turístico y dinamizador de la economía local en nuestra provincia”, ha concluido.