Ana María Galarza Ferri.
Periodista.
Ahora que Juego de Tronos ha terminado y nos hemos quedado huérfanos, necesitamos nuevos referentes, pero no hablo de cualquier tipo de referente seriéfilo, sino solo de aquellos capaces de hacernos llegar un mensaje similar al de Daenerys, Arya o incluso Cersei. Mucho se ha dicho sobre GOT y su mensaje feminista pero, ¿es acaso la única serie que apuesta por el empoderamiento y/o la crítica a la situación de la mujer en el mundo a lo largo de la historia? Por supuesto que no y, para demostrártelo, aquí tienes otras historias de ficción en las que el papel de la mujer juega un rol protagonista:
- Rebellion. Michelle Fairley, la mismísima Cateryn Stark, vuelve a convertirse en loba para defender a sus lobeznos. Consciente de la dificultad de alcanzar el éxito como mujer en la Irlanda de principios del siglo XX, Fairley da a su hija Elisabeth, interpretada por Charlie Murphy, el siguiente consejo: “Un buen matrimonio es la única manera que tiene una mujer de asegurarse su futuro”. En apenas unos minutos nos damos de que, a pesar de su carrera en medicina, la joven tiene que guardar las apariencias y hacer lo que se espera de ella. Sin embargo, Elisabeth quiere seguir sus ideales y lucha con convicción por ellos. Esta serie es la historia de esta y otras mujeres que lucharon por la independencia de la República de Irlanda y de cómo su papel fue decisivo, pese a que nadie, o muy pocos, lo hayan querido recordar.
- The Crown. Isabel II es mucho más que la reina de Inglaterra, es un icono para el país. En esta ficción nos narran cómo fue su llegada al trono, un ascenso que no fue precisamente un camino de rosas. The Crown nos muestra todas las facetas de la reina pero, sobre todo, nos muestras todas las caras de Felipe de Edimburgo, su consorte. Por ejemplo, el día de la coronación de la reina, el duque de Edimburgo tiene que arrodillarse ante La Corona al igual que el resto de los asistentes. No obstante, el duque, interpretado por Matt Smith, se niega porque asegura que se sentiría “como un eunuco, una ameba, que se arrodilla ante su mujer”. En lugar de ser un apoyo, se convierte en un obstáculo más.
- Suits. Dos abogados, hombres, son los protagonistas de esta historia pero su bufete está dirigido por una mujer, Jessica Pearson, quien ha tenido que dejar atrás su parte más emocional para proyectar una imagen de fuerza y firmeza. Sus contrincantes la tachan de desempeñar un rol masculino y es ahí cuando nos damos cuenta de lo difícil que es estar en el poder siendo mujer. Si muestras tus sentimientos, eres débil pero, si no lo haces, tampoco eres buen líder porque actúas como un hombre. Entonces, ¿cómo se supone que tiene que ser Pearson?
- American Crime Story. Un asesinato, un abogado defensor y una fiscal del Estado. Por un lado, un caso tratado como racismo; por otro, violencia de género y, según como se interprete, el jurado dictará una pena u otra. Si bien, no solo el juicio está en el punto de mira de todo el mundo. Una vez más, una mujer empoderada es criticada por tener una actitud que algunos asocian únicamente a los hombres. Las noticias sobre su peinado, su vestuario y sus rasgos faciales eclipsan a las noticias sobre su trabajo. Pero, cuando la rabia nos come como espectadores, llega el juez que instruye el caso para decirnos algo que a muchos todavía les cuesta entender: “Las mujeres que trabajan en profesiones de hombres son más fuertes que la mayoría y si tienen éxito son casi siempre objetivo de esta clase de trato”.
Como vemos, los ejemplos en la pequeña pantalla son infinitos y junto a estas, tenemos otras como The Good Wife, Orange is the New Black o, como era de esperar, Girls. Las series se han convertido en una manera de dar voz a una lucha que de todas y todos porque el feminismo, recordemos, reclama la igualdad entre mujeres y hombres y lograrlo no depende solo de nosotras, sino también del apoyo y respaldo que ellos nos quieran dar.