Valencia Noticias | Redacción.- La ecografía 5D permite observar con más detalle al bebé, además te otorgar la posibilidad de un análisis más profundo en cuanto a su estructura anatómica.
La ecografía en quinta dimensión realmente es muy similar a la de cuarta dimensiónVer fotos ecografías 5d. Consta de la apreciación de imágenes tridimensionales en movimiento, y si diferencia principal radica, en que gracias al software más avanzado de tratamiento sobre la imagen volumétrica, es posible obtener una mejor resolución, y mayor nitidez, haciendo posible detallar más aún la cara del bebé.
Con esta nueva técnica es posible eliminar la mayoría de los obstáculos que se interponen y que no permiten apreciar al bebé adecuadamente, otorgando una imagen más nítida y precisa, pensada además para hacer posible la visualización de la estructura anatómica del bebé y hacer posible el diagnostico de diferentes patologías hematológicas e inmunológicas, gracias a la posibilidad de evaluación de los flujos sanguíneos mediante doppler color.
La ecografía 5D representa un método excelente para mantener un mayor control del embarazo, como consecuencia de la capacidad para almacenar volúmenes grandes de datos, y generar grandes áreas y mediciones que posteriormente pueden ser revisadas tantas veces como sea preciso.
Aunque esta innovadora y evolucionada técnica permite una mejor apreciación del bebé, no representa un peligro para él, es inocua e indolora. Las frecuencias del ultrasonido son bajas, por lo que no puede apreciarse alteraciones en el feto, ni sobreexcitación en el mismo. Asimismo, se recomienda hacer la ecografía 5D entre las semanas 26 y 32, pues en el este momento la formación del bebé es más completa, y es posible obtener una imagen más nítida. Pasada las semanas 31 o 32, las posibilidades de obtener una imagen clara del bebé son muy bajas, pues la cantidad de líquido amniótico va disminuyendo.
Por otro lado, si en etapas tempranas del embarazo se realiza una ecografía 2D y se detecta una posible anomalía, se recomienda realizar una ecografía de quinta dimensión, con la finalidad de apreciar mejor la anatomía del feto, sin representar ningún riesgo para el mismo.