Los neumáticos contienen más de 200 compuestos químicos diferentes, principalmente caucho, pero también agentes como azufre, óxido de zinc o cadmio. La inhalación, sobretodo en dosis altas, puede provocar una insuficiencia respiratoria. Respirar esa humareda puede inflamar los pulmones y ocasionar una neumonía, también trastornos oculares y en el aparato digestivo. A largo plazo, además, pueden aparecer casos de asma. Los expertos aconsejan protegerse con una mascarilla.