El Péndulo | J. Entraigües.- Bajo el título de ‘Más vale solo que ciento volando’, el humorista Edu Soto trajo a el Teatro Talía un largo espectáculo unipersonal que, al hilo de diversos sketch, plantea su visión surrealista de construcción de un show unitario, de influyente base monologuista, activa participación del público y alto contenido de improvisación. Su proclama es la siguiente: “como estoy solo hago lo que me da la gana”.
La propuesta tiene su efecto ya que Soto conoce bien los elementos del monólogo y la improvisación y eso le permite hacer partícipe al público asistente que se une a los efectos del juego.
El presupuesto del espectáculo es sencillo, un humor contagioso, mucha acción sobre el patio de butacas y explotar los mejores recursos de los que dispone Soto para sacar sus dotes de cómico, improvisación y cantante (no olvidemos que formó parte de musical ‘Cabaret’ hace dos temporadas). Más allá de la funcionalidad de algún que otro sketch, ‘Más vale solo que ciento volando’ funciona y así quedó reflejado en un Talía lleno y con ganas de diversión. Soto puede seguir con su vuelo de humor ya que el sello de su show mantiene vivo el viejo principio de: irreverencia, humor sencillo y eficaz y explotación máxima del gag.