Fue desarrollado en el Reino Unido y serviría para tratar pacientes con colesterol alto sin efectos colaterales… salvo el precio
Los medicamentos más populares para el tratamiento del colesterol alto contienen estatinas –inhibidores de reductasa–, una formulación que viene siendo efectiva desde la década del 80 para prevenir enfermedades cardíacas en pacientes con colesterol alto. Las estatinas vienen siendo efectivas desde hace tres décadas. Pero, sin embargo, tiene efectos colaterales que incluyen fatiga, dolores musculares, dolores en las articulaciones y náuseas.
Según el diario británico The Telegraph, una nueva droga llamada Repatha (evolocuab) tiene las mismas propiedades que las tradicionales estatinas, pero sin efectos secundarios. Y eso no es todo en materia de beneficios: mientras que el típico paciente colesterólico debe ingerir uno o varios comprimidos al día, el tratamiento con la nueva droga se inyecta una vez cada dos semanas.
“No creo que el sistema de salud pública vaya a aprobar que se le dé esta droga a pacientes que solo tienen un poco de dolor muscular”, explica al Telegraph el profesor Peter Weissberg, director de la Fundación Cardiológica Británica, aunque agrega: “si se demuestra que es muy efectiva y baja el costo, lo que seguro sucederá, quizás esté a disposición de todos en unos años”.
Por lo pronto, Amgen, el laboratorio que ha desarrollado Repatha, está realizando un estudio clínico sobre 27.000 pacientes, que estará concluido en el 2017, que busca documentar la efectividad de su nuevo medicamento.
Cifras mortales
Según la Organización Mundial de la Salud, más de cuatro millones de personas mueren al año por enfermedades relacionadas a niveles altos de colesterol. En el último congreso de la Sociedad Española de Arteriosclerosis, en mayo de este año, se presentaron estudios que afirman que el 32% de las muertes están relacionadas a afecciones cardíacas mientras que un 28% se debe a accidentes cerebrovasculares.
Solo en la Unión Europea, las enfermedades cardiovasculares representan la principal causa de mortalidad en hombres mayores de 45 años y en mujeres mayores de 65.