España en modo Black Friday: récord de gasto, millones de compradores y un ejército de estafadores digitales al acecho

El Black Friday ha consolidado definitivamente su reinado en el calendario comercial español. Lo que nació como una jornada de rebajas en Estados Unidos para liquidar los excedentes posteriores al Día de Acción de Gracias se ha convertido en una maquinaria global que España ha abrazado con fuerza. Según el informe Black Friday 2025 de OBS Business School, nuestro país ya ocupa el quinto puesto del mundo en ventas y genera un 6,3% del total global durante esta campaña.

Las cifras son contundentes: el gasto medio previsto por persona se sitúa en torno a los 210 euros, uno de los registros más altos desde la implantación de esta tradición. La mayor parte del presupuesto se dirige a moda, tecnología, regalos y, con fuerza creciente, cosmética y juguetes, un indicio de que muchos consumidores adelantan sus compras navideñas a noviembre para aprovechar los descuentos.

Un fenómeno comercial que compite con la Navidad

Las empresas españolas han transformado el Black Friday en un periodo estratégico en el que se juega buena parte de sus ingresos anuales. Las promociones se extienden a prácticamente todos los sectores: moda, calzado, deporte, viajes, decoración, supermercados, hostelería, gimnasios e incluso el mercado del automóvil. Para muchas compañías, este impulso es clave para llegar a diciembre con una facturación saneada.

El informe señala que el Black Friday “ha alcanzado un peso económico que ningún evento había logrado en tan poco tiempo, hasta el punto de desafiar a las Navidades como principal motor del consumo”.

Amazon lidera las ventas: así eligen los españoles dónde comprar

El gigante que reina durante esta fecha es Amazon, imbatible por la amplitud de su catálogo, la logística de entregas y la seguridad percibida por los usuarios. Le siguen Ikea, El Corte Inglés y, en el caso del sector textil, Decathlon y Zara. Adidas y Nike completan la lista de marcas más buscadas, especialmente entre consumidores jóvenes.

La tecnología, como cada año, es el gran reclamo. La consola Nintendo encabeza el ranking de productos más vendidos, duplicando en demanda a otro clásico: el iPhone. Tablets, accesorios inteligentes y dispositivos de realidad virtual también figuran entre los artículos estrella de la campaña 2025.

España, quinta potencia mundial en compras online durante el Black Friday

El comercio electrónico sigue creciendo a un ritmo sostenido. En términos globales, Estados Unidos concentra el 21,2% de las compras online del Black Friday, seguido de Alemania, Brasil y Reino Unido. España se sitúa en quinto lugar, consolidando una posición destacada en un mercado dominado por la digitalización del consumo.

Este crecimiento ha ido acompañado de un cambio de hábito: los pagos con móvil ganan terreno frente a la tarjeta física, mientras las plataformas digitales se convierten en el epicentro de la experiencia de compra.

La otra cara del Black Friday: estafas digitales y fraudes en crecimiento

El aumento del comercio electrónico ha despertado también un incremento preocupante de estafas online. Según datos de la empresa de ciberseguridad Kaspersky, los fraudes relacionados con el Black Friday crecieron un 34% entre 2023 y 2024, una tendencia que se espera aún mayor en 2025 debido a la mayor sofisticación de los ciberdelincuentes.

Las estafas más frecuentes incluyen:

• Falsas páginas que imitan tiendas oficiales con descuentos irreales.
• Correos electrónicos o mensajes que suplantan a empresas de mensajería o bancos.
• Falsos sorteos y promociones que piden datos personales sensibles.
• Fraudes en plataformas de pago o enlaces que redirigen a webs infectadas.

Los expertos recomiendan comprobar siempre la autenticidad de la dirección web, verificar que la página utiliza protocolos de seguridad, evitar redes WiFi no protegidas y desconfiar de las ofertas demasiado atractivas. Revisar las políticas de devolución y los datos de contacto de la tienda es esencial para evitar sorpresas.

Un consumo masivo con riesgos crecientes

El Black Friday representa un impulso económico significativo, pero también un reto para la protección del consumidor. La combinación de millones de compradores, un ecosistema digital en expansión y la intensidad promocional crea un escenario atractivo para el fraude. Las instituciones y las propias plataformas de venta intensifican cada año sus mecanismos de seguridad, pero los expertos coinciden en que la primera línea de defensa sigue siendo la prudencia del usuario.

En un mercado cada vez más global y volátil, la campaña de descuentos continúa evolucionando. España se ha consolidado como una de las grandes potencias del consumo digital y, con ella, la necesidad de reforzar la cultura de compra segura y la educación digital de la ciudadanía.