Valencia Noticias | Redacción.- Las obras de ampliación y mejora que la Diputación de Valencia está llevando a cabo en la CV-415, entre Picassent y Montserrat, han sacado a la luz la existencia de una tubería de agua potable que discurre por el arcén de la misma carretera a su paso por Picassent y que podría afectar a la vía en cuestión. Por este motivo, se hace necesario generar una alternativa que permita el traslado de la instalación del agua potable.
El proyecto, denominado “Alternativa de la instalación de la red de agua potable de la CV-415 en el término municipal de Picassent” tiene un coste global de 154.469 euros, que será financiado por la Diputación de Valencia. La obra incluirá la renovación de la red de distribución de agua potable en la zona de Les Penyetes y la instalación de las tuberías y acometidas necesarias para la conexión.
Lo elevado del importe, “unido a la necesidad de desarrollar la obra lo más pronto posible con el fin de mejorar la situación y funcionalidad de la zona de actuación, nos llevó a solicitar a la Diputación de Valencia que se haga cargo de la financiación de las obras”, ha explicado la alcaldesa de Picassent y diputada provincial, Conxa García. Coincidiendo en dicha necesidad, la Diputación de Valencia, en Junta de Gobierno celebrada el pasado 18 de julio, acordó la suscripción de un convenio con el consistorio por el cual éste se encargará de la contratación y ejecución de las obras, mientras que su financiación correrá a cargo de la Diputación de Valencia.
Con la construcción de la nueva red de agua potable se solventarán las posibles incidencias que podría provocar la cercanía de las tuberías al firme de una carretera en cuya ampliación y mejora la institución provincial está invirtiendo más de 8,5 millones de euros.
En la actualidad se está desarrollando la última fase de esta obra que permitirá acabar con la peligrosidad de una vía estrecha, sin arcenes, con mala visibilidad, varios cambios de rasante y algunas pendientes. Una vez finalizadas las obras, lo que se prevé para el próximo mes de octubr, según ha explicado el diputado de Carreteras, Pablo Seguí, la CV-415 entre Picassent y Montserrat contará con una plataforma y firme nuevos, con 3,5 metros de anchura por carril, 1,5 metros de arcén a cada lado y una gran rotonda de 90 metros de diámetro en Venta Cabrera, intersección de las carreteras CV-405 y CV-415 y uno de los puntos más conflictivos de la provincia en materia de tráfico, con una elevada peligrosidad y siniestralidad.
Para Pablo Seguí, la actuación sobre esta carretera por la que transitan más de 5.000 vehículos al día, o 15.000 si se tiene en cuenta el cruce de Venta Cabrera, “es una obra necesaria que cumple con los criterios de la nueva Diputación de mejorar la calidad de vida y la seguridad de los ciudadanos y ciudadanas”. Algo en lo que también coinciden los primeros ediles de Picassent y Montserrat, Conxa García y Josep Maria Mas, cuyos municipios llevaban años reivindicando esta actuación.