La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) está investigando el hundimiento deliberado en el Mediterráneo de un barco con medio millar de migrantes que trataban de llegar a Europa.
Personal de la OIM y la policía italiana han recogido el testimonio de dos sobrevivientes palestinos en Sicilia, quienes relataron que los traficantes hundieron la nave ante la oposición de los pasajeros a trasladarse a otra embarcación más débil.
“Con esto aumentan nuestros cálculos de 2.223 muertes en este año a unas 3.000 muertes, una cifra cuatro veces mayor de los fallecidos en el Mediterráneo durante el pasado año, cuando se contabilizaron unas 700 muertes.”, explicó Joel Millman, portavoz de la OIM en Ginebra.
Los supervivientes explicaron que el barco había salido del puerto egipcio de Damietta el pasado 6 de septiembre, con unos 500 hombres, mujeres y niños palestinos, sudaneses sirios y egipcios, entre otros orígenes.
La OIM señaló que, de confirmarse en todos sus aspectos los relatos de esos dos supervivientes y de otros que salvaron la vida al permanecer durante varios días agarrados a restos de la embarcación, se trataría de la peor tragedia humana en el Mediterráneo en años.
Esos supervivientes fueron rescatados en alta mar por un mercante de bandera panameña que ya transportaba cerca de 400 migrantes que había recogido de otro naufragio cuando intentaban llegar tambien a Europa.
También se está investigando otro presunto naufragio reciente frente a la costa de Líbia en el que podrían haber muerto unos 200 migrantes.
