Investigadores de la Universidad de Sussex (Reino Unido) aseguran que los caballos muestran algunas expresiones faciales similares a los seres humanos y a los chimpancés. A partir de este hallazgo, han creado un sistema de codificación e identificación de estas expresiones, que podría ser útil para mejorar el bienestar animal y para proporcionar información a las clínicas veterinarias.
Un equipo de científicos que estudia la comunicación de los mamíferos ha demostrado que, al igual que los humanos, los caballos usan distintos músculos que están implicados en los rasgos faciales –incluyendo los de la nariz, los labios y los ojos– para alterar sus expresiones en una variedad de situaciones sociales.
Los resultados, publicados en la revista PLoS ONE, sugieren un paralelismo evolutivo en diferentes especies animales sobre cómo se utiliza el rostro para la comunicación.
El estudio se basa en investigaciones previas que exponen que las señales de la cara son importantes en la comunicación de los caballos, mediante el desarrollo de un sistema de codificación objetivo que identifica diferentes expresiones faciales individuales sobre la base del movimiento muscular.
Los caballos son predominantemente animales visuales, su visión es mejor que la de los gatos domésticos y los perros
La denominada Codificación de la Acción Facial equina (EquiFACS) que ha ideado el equipo de Sussex, en colaboración con investigadores de la Universidad de Portsmouth (Reino Unido) y la Universidad Duquesne (EE UU), les ha permitido identificar 17 ‘unidades de acción’ –movimientos faciales discretos– en caballos. Los científicos los compararon con 27 movimientos en los seres humanos, 13 en chimpancés y 16 en perros.
“Los caballos son predominantemente animales visuales, su visión es mejor que la de los gatos domésticos y los perros, sin embargo, su uso de las expresiones faciales se ha pasado por alto en gran medida. Nos sorprendió el rico repertorio de movimientos faciales complejas que tienen y que muchos de ellos son similares a los humanos”, dice Jennifer Wathan, coautor del trabajo.
A pesar de las diferencias en la estructura de la cara entre los caballos y los seres humanos, han sido capaces de identificar algunas expresiones similares en relación con los movimientos de los labios y los ojos. “Lo que vamos a estudiar ahora es cómo se vinculan estas expresiones a los estados emocionales”, añade Wathan.
Información para el bienestar animal
Analizaron imágenes de vídeo de una amplia gama de comportamientos naturales del caballo para identificar los diferentes movimientos
Para realizar el trabajo, los investigadores analizaron imágenes de vídeo de una amplia gama de comportamientos naturales del caballo con el objetivo de identificar los diferentes movimientos que los caballos pueden hacer con su rostro.
También llevaron a cabo un exámen anatómico de los músculos faciales que sustentan estos movimientos. Cada movimiento facial se identificó con un código.
“Antes se pensaba que cuanto más alejado estuviera un animal como especie de los humanos, más rudimentario sería su uso de expresiones faciales”, apunta Karen McComb de la Universidad de Sussex.
“A través del desarrollo de EquiFACS, sin embargo, es evidente que los caballos, con sus sistemas sociales complejos y de fluidos, también tienen una amplia gama de estos movimientos y comparten muchos de ellos con los seres humanos y otros animales”, afirma McComb.
Con el diseño de EquiFACS los científicos pueden documentar los movimientos faciales asociados a los diferentes contextos sociales y emocionales, y así hacerse una idea de cómo los caballos experimentan su mundo social.
“Además de mejorar nuestra comprensión de la cognición social y la psicología comparada, en última instancia, los hallazgos deberían proporcionar importante información para clínicas veterinarias y de bienestar animal”, concluye la investigadora.