El Péndulo | Redacción.- Sala Russafa centra su programación semanal en la música. El viernes 29 (20:30 horas) marcará el regreso de Mist, que vuelve tras siete años de silencio con un nuevo disco, ‘The Loop of Love’. Un descanso que su líder, Rick Treffers, ha aprovechado para dar salida a proyectos personales como ‘El Turista Optimista’, una divertida y entrañable colección de canciones en español surgida de la experiencia de vivir en Valencia los últimos cuatro años.
Este holandés creó Mist en Amsterdam, en 2002. La banda publicó tres álbumes y un EP que alcanzaron repercusión en Holanda, España, Alemania, Méjico y Chile, presentándolos en varias giras por Europa y América del Sur, y haciéndose un hueco en la música independiente nacional, gracias a su estrecha relación con nuestro país.
Ahora, afincado en España, retoma su antiguo proyecto con un nuevo disco en el que recupera su característico sonido onírico, lleno de pasajes cálidos, íntimos y envolventes. ‘The Loop of Love’ crea bucles en los que Treffers entra y sale para hablar del amor, de la intención de soltar lastres del pasado para empezar de nuevo, mezclando el optimismo como cierta nostalgia y melancolía.
Para defender este nuevo trabajo en directo en España, ha integrado en la banda a destacados músicos de la escena local como Gilberto Aubán (Gilbertástico), Remi Carreres (Comité Cisne), Sergio Devece (Corcobado) o Javi ‘Galope’ (La Muñeca de Sal). Además, en su actuación en Sala Russafa contarán con la colaboración especial de la vocalista Rebeca Ibáñez (Uncle Son). Y Marta Domingo aportará su voz y violín en una velada de pop evocador, marcada por la cercanía, la sensibilidad y el positivismo que caracterizan a Treffers.
Lülla presenta su tercer disco, canciones oscuras, íntimas y serenas
La programación musical del fin de semana se completa con la presentación en directo del tercer trabajo de la banda valenciana Lülla (sábado 30 mayo 23:00 horas). Una formación que cumple diez años sobre los escenarios y donde se encuentran músicos de la escena independiente valenciana como Juanjo Frontera (Frontera y Uncle Son), Javier Lacasta (Lola Puñales), Diego López (Ontario), Carolina Otero (The Someone Else’s y Mad Robot) y Juan Terol (Trinidad y Ontario).
Su anterior trabajo, ‘Fall in love with your self because I love no more’ (2012) tuvo una buena acogida por críticos como Julio Ruiz (Disco Grande, Radio 3), Pilar Arzak (Peligrosamente juntos, Radio 3), Carlos Pérez de Ziriza (El País, Efe Eme, Rolling Stone…), Eduardo Guillot (Levante-EMV, Rockdeluxe, ByTheFest…) o Raúl Serrador (Mondo Sonoro), entre otros. Y fue seleccionado entre los mejores discos de la Comunidad Valenciana por publicaciones especializadas.
En Sala Russafa recorrerán las canciones de su nueva propuesta Lülla, editado por Malatesta Records. Un disco homónimo, influido por el género negro, en el que caben historias de asesinatos aparentemente involuntarios, mórbidas infidelidades descubiertas, novias de las sombras, inquietantes despedidas de femmes fatales, noches con niños perdidos (o abandonados) o leonas enamoradas de las dulces cebras que van a devorar… Elegantes medios tiempos que crean una atmósfera íntima y que se alternan con temas más luminosos, combinando los instintos más salvajes y las emociones más desnudas.
Con un sonido que ha ido evolucionando a lo largo de los años, Lülla parte de la improvisación en el local de ensayo para crear temas de pop rock algo siniestro y kraut. Sin embargo, no temen hacer guiños a otros sonidos como la bossa nova o el low en canciones con una elevada carga emocional, gracias a la suma de una potente instrumentación con las letras y voz de la escritora Carolina Otero, quien recientemente ha publicado su cuarto poemario, ‘Balada del rímel corrido’ (Ed. La Huída).
Una intensidad que llevan al directo, como demostrará su actuación en el teatro de Ruzafa, que abrirá como telonera Lanuca, el sensible y personalísimo proyecto de Ángela Bonet. Una noche que marca el arranque de una pequeña gira de conciertos cuya siguiente parada será el 6 de junio, en la sala Café La Palma de Madrid, junto a Polonio.