La filosofía del movimiento ‘Slow Food’ entronca con Ciao Checca y se centra en la EcoGastronomía, preocupada por el placer de comer sin olvidar el respeto al entorno.
Ciao Checca, el primer ‘Slow Food’ italiano de España y el primero que fusiona el concepto Slow Food con Street Food, se inauguró ayer en el Mercado de Colón y consiguió reunir, bajo la música de jazz, pesto, cicerchia y checca, varias pinceladas de la sociedad valenciana.
Matteo Moricini y Andrea Lo Bagno ejercieron de anfitriones con la ayuda de Irene Zibert, de Slow Food para recibir a Beatriz Sobrino, Elena Ruiz de la Torre, Carmen Lloria, Sofía Alama, Nacho Gómez Trénor, Carolina Gil, Maria José Ruz, Jaime Valls, Mónica Mataix, Adela Dondéris, Ana Jofre o Rafa Capdevilla. También disfrutaron del vino ecológico los hermanos Manglano, Alfonso, Angela y Fernando, barón de Terrateig, Juan Valero de Palma, Claudia Dupuy de Lôme, Joseca Arnau y el joyero Vicente Gracia, recién aterrizado de Nueva York.
Entre otros se encontraban artistas como Monsieur Alex García, Alfonso Zumárraga o Nacho Paricio; periodistas como Guillermo Arazo, Paco Alonso, Jesús Terres, Cova Morales, Ana Mansergas, Isabel Goyanes, Elvira Graullera; arquitectos como Javier Vallés y Ana Dexeus; universitarios como Alberto Peris, Cris Cuartero o Andrea Rico. Del sector médico Nacho Crespo e Isabel Bermejo Merchante; del económico Paz Oria, Jose Díaz o Jose Cañizares; del empresarial Carmen Romero, Sonia Gómez Luzón o Isabel Cosme; de la abogacía Paz Sansaloni, Fiona Barreira o Armando López. Sin olvidar a los vecinos Mónica Piñones de Las Delicias, Christian de Mi Cub o Steve de Ma Khin.
Y todos entendieron el espíritu de ‘Slow Food’, la organización internacional fundada por Carlo Petrini en 1986 que defiende y promueve la alimentación de calidad basada en tres principios: Bueno, justo y limpio. Y comprobaron como las peculiaridades de este nuevo concepto gastronómico no acaban ahí. En Ciaco Checca no hay microondas, ni horno, ni freidora, lo que asegura que no se recalienta y que todos los platos se preparan en directo de forma abierta a los comensales. Toda la comida es tradicional y casera, olvidándonos de los tópicos como la pizza y la pasta. Volver a los orígenes y recuperar productos casi perdidos es otra de las características de ‘Slow Food’, muy arraigado en Italia
Por otro lado, todos los proveedores lo son porque protegen el Medio Ambiente y respetan los ciclos de la tierra, sin prisa. Ciao Checca no utiliza productos químicos, ni en su producción ni en su elaboración pues, los grandes platos, se hacen buscando materias primas con responsabilidad, hacia los que las producen y hacia el entorno. Es la EcoGastronomía, siempre natural y limpia.
Anoche se pudieron degustar, por primera vez en España, Mattagliati de huevo, alubias rojas de Lucca, salsa de tomate, aceite de oliva y pimienta; puré de cicerchia de Serra de Conti, endibia o verduras de hoja de temporada al vapor, aceite de oliva y sal; tallarines al huevo sin gluten con peso de albahaca, piñones y parmesano y… Además, se pudo beber vinos y cervezas ecológicas.
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