Valencia Noticias | Agencias.- Varios diplomáticos advirtieron, en vísperas de la reunión cumbre de este jueves y en cuyo temario figura de manera destaca la oleada de inmigrantes que afecta a Italia y Grecia, que varios países miembros de la Unión Europea (EU) mostrarán su rechazo a un plan de cuotas que los obligue a compartir a los miles de refugiados que llegan al continente desde el Mediterráneo.
Los conflictos armados y la extrema pobreza del norte de África, movilizaron a más de 100.000 inmigrantes hacia Europa durante 2015 y casi 2.000 murieron o desaparecieron durante la travesía del mar Mediterráneo.
La Unión Europea presentó un plan en el que expresa su deseo de que las 28 naciones compartan los 40.000 sirios y eritreos que lleguen a Grecia e Italia en los próximos dos años para aliviar la carga. El plan se considera una medida de emergencia para ayudar a enfrentar la masa de inmigrantes que llegan en embarcaciones precarias.
Sin embargo, un alto funcionario de la UE, en declaraciones a la agencia AP, advirtió en la jornada de ayer que “la idea de que Bruselas vaya a imponer cuotas no prosperará”.
El funcionario está involucrado en los preparativos de la cumbre y no quiso ser identificado porque las deliberaciones están en marcha y aún deben continuar su rutina de sesiones.
Un borrador de la declaración final de la cumbre obtenida por The Associated Press dice que “todos los Estados miembros acordarán para fines de junio la distribución” de los refugiados.
Grupos defensores de los refugiados y organizaciones humanitarias la consideran una solución insuficiente y tardía, ya que las oleadas de migrantes suelen aumentar entre junio y septiembre.
Mientras tanto, países pequeños como Líbano y Jordania albergan a cientos de miles de personas que huyen de conflictos, principalmente en Siria e Irak.
Mientras los Estados más afectados, como Italia y Grecia, se esfuerzan por hacer frente a la situación, la Comisión Europea ha buscado hacer obligatorio el plan para los refugiados debido a que muchas naciones no han cumplido en el pasado con sus promesas de solidaridad con sus vecinos.
“La solidaridad no se puede imponer; proviene del corazón y de la mente”, afirmó el miércoles el embajador de Hungría ante la UE, Peter Gyorkos.
“No creemos que un plan obligatorio sea la medida adecuada”, opinó otro diplomático del bloque.
Se sabe que una docena de países se oponen a una medida obligatoria. Otra docena apoya el plan con la condición de que se modifique el método para la distribución de los refugiados.