Valencia Noticias | Redacción.- Con motivo de la celebración del Día Internacional de los Bosques, la Concejalía de Medio Ambiente y Cambio Climático ha dado a conocer dos iniciativas para fomentar el conocimiento y la protección del parque arbóreo urbano, compuesto por más de 150.000 árboles, de los que aproximadamente 350 tienen la calificación de monumentales, ya sea por edad o por tamaño.
La primera tiene como objetivo los ejemplares de higuera australiana (Ficus Macrophylla), con especial atención a los árboles monumentales. Los técnicos de la concejalía anclarán al terreno las raíces aéreas de las higueras, aumentando así los puntos de apoyo del árbol. Según explicó la concejala de Medio Ambiente, Pilar Soriano, “de esta manera la copa puede ser mayor y con ello la capacidad de generación de oxígeno y de captación de CO2también se incrementa”. La primera higuera sobre la que se ha actuado es el árbol monumental de casi veinte metros de alto que se encuentra en el parque de la Glorieta y la intención es continuar actuando sobre el resto de las higueras australianas de la ciudad.
Asimismo, la Delegación de Parques y Jardines ha comenzado hoy la colocación de placas identificativas del arbolado monumental, en las que figura su lugar de procedencia, su nombre común en castellano y valenciano, su denominación científica, la familia a la que pertenece y la calificación de ejemplar monumental. La primera placa se ha colocado precisamente en la higuera australiana de la Glorieta, con un grupo de alumnos del colegio público Primer Marqués del Turia como testigos.
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) celebra desde 1971 el Día Internacional de los Bosques todos los 21 de marzo. El objetivo de la jornada es llevar a cabo actividades de conmemoración y concienciación de la importancia fundamental de los bosques para la vida y el mantenimiento de las actividades humanas.
La existencia del arbolado tiene una gran importancia en todos los entornos y especialmente en las ciudades, donde los árboles equilibran las condiciones ambientales refrescando el aire al aumentar la humedad ambiente. Asimismo, actúan de pantalla acústica y visual y reducen la velocidad del viento, además de depurar el aire contaminado.