A ella desembocan Cavallers, Bosseria, Quart, Conquista, Moro Zeit, Sant Miquel y Sant Jaume. En un principio la plaza tuvo un trazado bastante diferente al actual. Era una vía que formaba parte de una pequeña barriada de su título, área que en diferentes épocas ha sido denominada con el nombre de: Alcudia, Caldereros, Toçal, Tozal, Troç Alt y Trosalt. El topónimo Tossal está muy extendido en la orografía valenciana, siempre referido a una montaña o lugar de cierta altura. Así, el título de Tossal parece más correcto de este lugar elevado que limitó con la Moreria. Hasta hoy se puede comprobar que la plaza presenta una prominencia respecto a las otras calles de su alrededor. Esta elevación existía desde muy antiguo y fue aprovechada construyendo un dique para evitar el paso de las aguas en posibles desbordamientos del ramal del río Turia.
El topónimo Tossal está muy extendido en la orografía valenciana, siempre referido a una montaña o lugar de cierta altura.
En el siglo XIV existieron dos tablas de carnicerías y un obrador contiguo a ellas, todo ello de procedencia árabe. Los Caldereros se concentraron en el lugar y su presencia dio nuevo nombre a la reducida barriada de la Caldereria.
Los Caldereros se concentraron en el lugar y su presencia dio nuevo nombre a la reducida barriada de la Caldereria.
Ya en el siglo XVIII Orellana cita el Toçal como: parage bien conocido y que da principio a las calles de Quarte, de la Bolsería y otras, y tiene de muy antiguo el renombre que hoy goza de Toçal. Por entonces se hallaba la barbería del sangrador Joseph Ortells, un punto de referencia y venta de objetos procedentes de las testamentarías. A principios del siglo XIX existía la pastelería de José Castells. Posteriormente se instaló la relojería de Salvador Vilella que era continuadora de la antigua de Escrivá, especializada en composturas de relojes y cajas de música.
A mediados del siglo XX derribaron varios edificios que se hallaban en el centro, quedándose la plaza con la configuración actual. Fue famosa una funeraria, La Católica, que permaneció hasta 1936. Las intervenciones arqueológicas dejaron al descubierto el subsuelo con parte de la muralla árabe que se puede ver la Galería del Tossal. Locales de ocio muy visitados son: el Café Infanta, y el Café Sant Jaume, instalado sobre la antigua farmacia del doctor Cañizares.
A mediados del siglo XX derribaron varios edificios que se hallaban en el centro, quedándose la plaza con la configuración actual.
Alcudia, ese punto alto de la ciudad donde a través de los años se establecieron caldereros, barberos, sangradores, funerarias, relojerías y pastelerías, hasta llegar a los locales de ocio nocturno y terraza. ¿Desean un Agua de Valencia? ¡Qué sean dos!
A. P. R. S. : Archivo Privado de Rafael Solaz