Las informaciones que confirman la muerte de 40 niños pertenecientes a grupos minoritarios -que se habían visto desplazados de la ciudad y del distrito de Sinjar por la violencia armada-, son extremadamente preocupantes.
Según informes oficiales recibidos por UNICEF, estos niños de la minoría Yazidi murieron como consecuencia directa de la violencia, el desplazamiento y la deshidratación que sufrieron en los últimos dos días.
Las familias que huyeron de la zona necesitan ayuda urgente, y los 25.000 niños que están ahora atrapados en las montañas que rodean Sinjar tienen la necesidad extrema de recibir ayuda humanitaria incluyendo agua potable y saneamiento.
Sinjar, un distrito de Ninewa ubicado en el noroeste de Irak en el que hay unos 150.000 niños –muchos de ellos desplazados internos-, fue ocupado por el Estado Islámico (anteriormente conocido como ISIS) el domingo.
Los niños son especialmente vulnerables, y también son los más afectados por la violencia continua, el desplazamiento y los enfrentamientos en Irak. UNICEF reitera su llamamiento urgente para que todos los niños sean protegidos y puedan recibir de manera inmediata la ayuda que necesitan para salvar sus vidas.
UNICEF hace un llamamiento a aquellos que tienen influencia para que garanticen el acceso libre y seguro de los niños y las mujeres a los refugios, así como a respetar la protección especial otorgada a los niños bajo el amparo de la Ley Humanitaria Internacional y de Derechos Humanos.”
