Los jugadores y cuerpo técnico de la primera plantilla del Levante UD, así como una representación del Consejo de Administración del club encabezada por el presidente, Quico Catalán, ha realizado esta mañana la tradicional ofrenda de flores a la Virgen de los Desamparados, en la Basílica de la Virgen, antes del inicio de la temporada.
El arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, ha presidido el acto en el que también ha participado el vicerector de la Basílica, Rafael Cerdà y el segundo capellán del club, José Gerónimo Tébar.
Durante el acto el Arzobispo ha destacado “la importancia de trabajar juntos al servicio de la conquista de algo que en vuestro caso es ganar pero que es más importante el trabajo en equipo”. Asimismo, el prelado ha dicho a los jugadores del Levante que son “ejemplos para jóvenes y niños” y ha destacado que el club de fútbol “es también un ejemplo para esta sociedad que está rota y dividida”.
Por último, monseñor Osoro ha subrayado que “la ganancia más grande para todos es convertirnos en hermanos” y ha deseado a los jugadores éxito en esta temporada y que “la Virgen María os ayude a jugar en equipo”.
Por su lado, el presidente, Quico Catalán, ha dado gracias a la Mare de Déu “por la temporada pasada que nos llevó en bolandas” y le ha pedido para este año “protección para los jugadores, empleados, cuerpo técnico y afición”.
VLC Noticias | Redacción. Fotos: Samuel Martos / AVAN