Cuando las cosas se hacen bien, no pasan desapercibidas. Esa puede asumirse como la máxima de las últimas temporadas del Levante UD. Incluso cuando la situación venía peor dada, las cosas se hicieron bien. Sin dinero, pero con cabeza y sabiendo lo que había. El resultado ha sido evidente. En tres años el equipo se puede decir que se ha asentado en Primera, a pesar de los apuros finales de la pasada campaña, y el césped del Ciutat de València se ha convertido en un escaparate impresionante no sólo para los jugadores (como los casos de Caicedo o Nano), sino también con los técnicos que son capaces de obrar milagros, si nos atenemos a las condiciones en las que trabajan.
El año pasado fue Luis García quien, después de dos años muy meritorios al frente del banquillo granota, salió casi a subasta en la Primera División española. A punto estuvo de cambiar de barrio y dirigir al otro equipo de la capital, al Valencia CF, pero al final fue el Getafe quien la puso una buena cifra encima de la mesa pensando en el sueño europeo de Getafe.
Pero lo que de verdad ha llamado la atención e incluso ha traspasado las fronteras de la Liga BBVA ha sido la temporada que Juan Ignacio Martínez está realizando al frente del combinado de Orriols. Con el menor presupuesto de la competición ha llegado a ser líder y cuando faltan algo más de diez jornadas para que finalice el campeonato el equipo está en la cuarta posición de la tabla, lugar que apenas ha perdido en un par de ocasiones.
Todo eso ha hecho que en otros equipos de mayor poderío ya se hayan planteado la posibilidad de que Juan Ignacio, que se ha estrenado este año en Primera, pueda dirigir sus banquillos. Lo que puede sorprender es que incluso desde la Premier ya hayan enviado emisarios para interesarse por la situación de JIM. Cierto es que no es el Chelsea, tras destituir a Vilas Boas, el que pregunta por el técnico levantinista, pero sí equipos de media tabla que han visto en el entrenador granota una importante apuesta para ampliar su caché en la competición británica.
Norwich, West Bromwich, Aston Vila… equipos que quieren tener más protagonismo en su Liga han visto en la figura de JIM una de las bazas importantes para conseguirlo. Y, lo cierto, es que no van desencaminados. El Levante ha llegado a donde está en la competición con un juego muy similar al que se practica en las islas, es decir, un posicionamiento muy fuerte en defensa y un rápido y contundente ataque. Quizás sean tres o cuatro llegadas a la meta rival, pero efectivas.
Todo esto no quiere decir que la próxima temporada el técnico de Rabasa tenga que aprender inglés, lo que sí es cierto es que el cartel ya se lo ha ganado en la Premier.
VLCCiudad / Pepe Aguilar