A las puertas del Congreso, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, se ha reafirmado en las acusaciones que hacía en su cuenta de Twitter, donde criticaba la “poca vergüenza” e “ignorancia” de Rivera, del que ha criticado su “cuñadismo de extremo centro” y al que se ha llegado a referir como “mascota de Rajoy”.
Pero, además, ha puesto de relieve que quien ha facilitado que hoy Rajoy pueda felicitar a Trump por su victoria desde La Moncloa cuando dijo en dos campañas electoral que “nunca” lo haría ha sido Rivera, a quien también ha cuestionado que haya apoyado en la investidura al candidato que aplica “las políticas más parecidas a Trump en España.
Por otra parte, el líder de Podemos ha afirmado que se avergüenza del “servilismo” del presidente del Gobierno español ante un “tipejo” como Donald Trump y ha dicho que no felicitará al candidato republicano por su triunfo en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Iglesias rechazado especialmente que el jefe del Ejecutivo resalte que las elecciones suponen una demostración de la vitalidad de la democracia estadounidense. “Es un ejemplo de servilismo que me avergüenza como español”, ha denunciado.
Ha subrayado que cuando su partido gobierne mantendrá buenas relaciones diplomáticas con todos los países, pero ha recalcado: “No doblaremos la rodilla de nuestra patria y menos ante un sinvergüenza y un tipejo como Donald Trump”.
Anteriormente, ha negado en declaraciones a la Cadena Ser que sea “populista” como Trump y ha alertado que el “discurso para fascistas” de éste se puede reproducir próximamente en Europa. “Lo que está ocurriendo en los Estados Unidos va a ocurrir pronto en Francia con Marie Le Pen, que se ha apresurado a felicitar a Trump”, ha advertido. A su juicio, la solución pasa por “acabar de una vez” con las políticas neoliberales, que “han llevado al desastre a las poblaciones”. “Si no, la alternativa a esto es fascismo”, ha asegurado.
Para Iglesias, el presidente electo estadounidense “no es un antisistema”, sino “un millonario que se ha hecho rico con el sistema” y ha asegurado que lo que busca es “acentuar y profundizar las políticas que ya se han hecho”, como, por ejemplo, el “racismo institucional que ya se da en Europa”.