Valencia, 24 de abril de 2025 – La Federación Empresarial Metalúrgica Valenciana (Femeval) y el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Industriales de Valencia (Cogiti) han presentado un informe con 13 medidas consideradas como “realistas, ambiciosas y factibles”, con el objetivo de que la improvisación no vuelva a ser el modus operandi ante emergencias como la dana del pasado 29 de octubre. Estas propuestas buscan una aplicación inmediata para mejorar la respuesta en situaciones de desastres naturales.
Las medidas sugieren mejoras en la atención a colectivos vulnerables, refuerzo en la coordinación y corresponsabilidad para actualizar y ejecutar planes de emergencia en las empresas, agilización de indemnizaciones y la aceleración de obras de encauzamiento. Vicente Lafuente, presidente de Femeval, y Tomás Játiva, decano de Cogiti Valencia, explicaron estos aspectos tras entregar el documento ‘DANA: Lecciones aprendidas’ a la consellera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, Marián Cano, y a otros representantes de entidades como la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana, la Diputación de Valencia y la Confederación Hidrográfica del Júcar.
El documento presentado subraya, entre otras cosas, la necesidad de acelerar la contratación para ejecutar obras de encauzamiento y conceder ayudas para mitigar las consecuencias de futuras inundaciones. Játiva destacó la importancia de agilizar los pagos del Consorcio de Compensación de Seguros, colaborando con las aseguradoras.
Además, se propone rediseñar y fortalecer los protocolos de emergencia, incluyendo planes a nivel autonómico y estatal, con puntos de información físicos, especial atención a parques industriales, actualización regular de protocolos, formación, mejora de coordinación entre agentes de emergencia y la creación de una plataforma para gestionar servicios esenciales.
Respecto a decisiones internas de las empresas, Lafuente subrayó la necesidad de coordinar planes de emergencia a mayor escala e insistió en que hace falta más regulación para gestionar situaciones de emergencia. Afirmó que la corresponsabilidad es crucial, aunque lo existente es todavía insuficiente, y pidió consolidar una red de colaboración entre EGM, municipios, polígonos y la Generalitat.
El documento también enfatiza la creación de censos municipales de personas vulnerables para asegurar asistencia, destacando la importancia de canales de comunicación ágiles que incluyan la lengua de signos y la perspectiva de accesibilidad universal.
En cuanto a la gestión de residuos, se recomienda un Plan Integral que contemple emergencias, y se aboga por contratar profesionales cualificados para la reconstrucción, con formación para sectores con déficit de personal.
Proponen revaluar el emplazamiento de infraestructuras esenciales, evitar centros de transformación en sótanos, ciertas instalaciones de alta tensión en barrancos y explorar una normativa supralocal para la distribución de agua y saneamiento.
Vicente Lafuente indicó que estas medidas, tras ser discutidas con el gobierno valenciano, deberían considerarse a nivel nacional, ya que los problemas no son exclusivos de Valencia. Tanto Cogiti como Femeval están dispuestos a colaborar con las administraciones para que las propuestas no queden olvidadas, subrayando que de su implementación depende el futuro de muchas personas y empresas.
Tras recibir el documento, la consellera Marián Cano aseguró que trabajar en estas medidas es una “premisa básica” para la administración. Indicó que se mantendrá un “diálogo abierto” y “escucha activa” con todos los sectores, destacando la respuesta de la Generalitat, que ha movilizado más de 76 millones en ayudas directas para las empresas afectadas. Cano también defendió la prolongación de la vida útil de la central nuclear de Cofrentes y criticó la paralización de obras hídricas urgentes, abogando porque las ayudas por inundaciones no tributen.
