Desde hace mucho tiempo, los dueños de mascotas se han enfrentado al dilema de si pueden entrar a un bar o restaurante con sus perros. La respuesta no siempre ha sido clara y ha variado según el establecimiento. Sin embargo, la Ley de Bienestar Animal, promovida por Ione Belarra y aprobada el pasado mes de febrero en el Consejo de los Diputados, establece nuevas obligaciones para los bares, cafeterías y restaurantes en relación a los animales de compañía.
Según el artículo 29 de la ley, los establecimientos públicos y privados, alojamientos hoteleros, restaurantes, bares y en general cualquier lugar donde se consuman bebidas y comidas, podrán facilitar la entrada de animales de compañía que no supongan un riesgo para las personas, otros animales y las cosas. Sin embargo, los dueños de mascotas deberán cumplir con una serie de obligaciones en estos establecimientos, que se especifican en el punto número 5 del mismo artículo.
En resumen, los dueños de los animales de compañía que entren en los establecimientos mencionados deberán llevar a sus mascotas conforme a las condiciones higiénico-sanitarias y respetar las medidas de seguridad que establezca el propio establecimiento o medio de transporte, así como la legislación sectorial específica.
Por otro lado, aquellos establecimientos que no admitan la entrada y estancia de animales deberán mostrar un distintivo que lo indique, visible desde el exterior.
Es importante tener en cuenta que la Ley de Bienestar Animal también establece novedades en cuanto al acceso de perros en transporte público y privado. Los transportes públicos y privados deberán facilitar la entrada de animales de compañía que no constituyan un riesgo para las personas. En el caso de los conductores de taxis o de vehículos de turismo con conductor, podrán aceptar animales de compañía en sus vehículos de manera discrecional.
En definitiva, la Ley de Bienestar Animal ha establecido unas normas claras en relación a la entrada de animales de compañía en establecimientos públicos y privados. Ahora los dueños de mascotas pueden tener más claridad sobre dónde pueden entrar con sus peludos y qué obligaciones deben cumplir para garantizar el bienestar de todos los que se encuentren en el establecimiento.