El 11 de marzo tuvo lugar la cuarta y última jornada de los Juegos Deportivos Municipales de Esgrima en el Polideportivo El Canbanyal de Valencia. La inminente celebración de las fiestas falleras, la mayoría ya con actos programados este domingo, mermó la asistencia de participantes. Aun así se dieron cita más de sesenta tiradores de diferentes colegios y clubes, como la Sala d’Armes València, Club de Esgrima Valencia, Sala de Armas de Paterna, IES Ferrer y Guardia, Colegio Alemán, Colegio Humanista Mariner, Colegio Serrería y Colegio San Pedro.
Para los alevines y benjamines la competición una vez más fue una sucesión de rondas de poules para acumular puntos. Al tratarse de la última jornada próximamente se sabrá quienes han conseguido encabezar el ranking de los juegos deportivos municipales, y sus trofeos los recibirán el próximo mes de mayo en la fiesta de fin de curso que se organizará para tal fin.
En las categorías superiores una vez más destacó la participación de la Sala d’Armes València, cuyos tiradores se alzaron con siete de las ocho medallas en juego. Así, el único tirador que resistió el envite de los blanquiazules fue Germán Fontes del Colegio Alemán, a la postre ganador de la competición en espada masculina. Le acompañaron en el podium Carlos De Juan, Adrián Fidalgo y Hugo Fernández, tiradores de la SAV.
En espada femenina los únicos colores que se vieron en la entrega de metales fueron el blanco y el azul, colores de la SAV, pues las cuatro tiradoras que consiguieron la ansiada recompensa pertenecían a este club. En esta ocasión la ganadora fue Eva Pavía, quedando clasificada en segundo lugar Miriam Muñoz, y terceras ex aequo Amanda Ramón y Marta Cabanes.
VLCCiudad / Redacción
Es nuestra arma para acabar con la impunidad de los más poderosos.
Te necesitamos a ti también para seguir haciendo un periodismo libre de presiones políticas y económicas
Hay mucho trabajo detrás de una noticia. Contrastar fuentes, redactar, analizar, recabar información… Pero todo esto implica unos costes muy altos, porque aunque parezca una obviedad, hacer buen periodismo, en estos momentos, es complicado.