El 9 d’Octubre, a las doce del mediodía, se realiza uno de los actos más emotivos de la festividad del Día de la Comunitat Valenciana: La bajada de la Senyera por el balcón del Ayuntamiento.
Como es sabido, la Reial Senyera es la única bandera dentro de nuestro país que, por mandato real, no se inclina ante nadie, ni siquiera ante la enseña nacional o el mismísimo Rey de España. Por este motivo, para que dada su altura, no tenga que inclinarse, es bajada sujeta con una cuerda desde el balcón del edificio consistorial hasta la calle, en la plaza del Ayuntamiento.
Desde este punto es desde donde la corporación municipal inicia su procesión cívica a pie, con el portador de la Senyera delante -honor que Rita Barberá delega todos los años en alguno de los concejales sea cual sea su partido-, honor que este año ha recaído en el edil socialista Salvador Broseta.
La comitiva llega en procesión hasta la puerta barroca de la Catedral de Valencia, popularmente llamada ‘de los Hierros’, donde ya esperaba el nuevo Arzobispo de Valencia, el Cardenal Cañizares, que ha significado además este año su estreno en este acto y, siendo además valenciano de cuna -natural de Utiel- como es, la importancia del acto ha sido aún mayor si cabe.
Besaba el Cardenal Cañizartes la Reial Senyera para luego pasar al interior con la comitiva municipal y presidir el Te Déum en el que, por cierto, podíamos ver a autoridades como el president de la Generalitat, Alberto Fabra, y el todavía president de Les Corts, Juan Cotino.
Tras dejar la Catedral, la Senyera vuelve a salir a la calle en procesión, esta vez por la puerta gótica o ‘de los Apóstoles’ para, tras cruzar la plaza de la Virgen, llegar al Palau de la Generalitat, en cuyo interior es objeto de homenaje de las autoridades autonómicas.
Volverá la enseña de todos los valencianos a la calle, pero en esta ocasión en dirección a la plaza de Alfonso el Magnánimo, en la que tras penetrar en el parque conocido como El Parterre, en su centro se alza la estatua ecuestre del Rey En Jaume I, ante la cual se hace un homenaje.
La comitiva seguirá después camino ya de nuevo hasta el Ayuntamiento, donde de nuevo es izada la Reial Senyera hasta el balcón del Ayuntamiento, donde descansa de nuevo en su habitual ubicación, guardada y custodiada.
VLC Noticias | Javier Furió. Fotos: José Sapena