Los socialistas volverán a presentar una moción para que, entre otras medidas, en cada barrio se abra un centro escolar para que los menores puedan comer
La concejala del grupo municipal socialista en el ayuntamiento de Valencia Anaïs Menguzzato ha advertido que las medidas que pone en marcha el equipo de Gobierno son “asistencialistas” y “solo pretenden tapar las colas de personas que van a pedir comida con la tarjeta solidaria”. “Ni los bancos de alimentos, ni las tarjetas solucionan la cronificación de la pobreza”, ha advertido.
En estos términos ha valorado la presentación de la tarjeta solidaria y ha adelantado que su formación volverá a presentar una moción al pleno del ayuntamiento para que, entre otras medidas, en cada barrio se abra un centro escolar para que los menores puedan acudir a comer. Una iniciativa que presentaron los socialistas hace un año en el pleno del ayuntamiento pero que fue rechazada por el Partido Popular.
Menguzzato ha señalado que las “dificultades” para las familias “no sólo están acrecentadas por una profunda crisis, sino que se añaden decisiones políticas injustas como la subida del IVA para material escolar, la progresiva disminución de las ayudas públicas de comedor, transporte, libros y servicios extraescolares”.
“El resultado es que aquellos niños y niñas que sufren mayor riesgo de pobreza o la padecen, quedan más desprotegidos en lo que se refiere a derechos fundamentales”, ha advertido y ha recordado que los socialistas han denunciado en “múltiples ocasiones la indignidad y el recorte de derechos que supone que las familias tengan que hacer colas en la calle para pedir que les den de comer”.
Menguzzato ha señalado que la “solución” no es “acabar con la imagen de las colas y cambiarla por tarjetas”, sino que pasa por “invertir en los centros municipales de servicios sociales, es decir, en la atención integral a esas familias que no tienen la capacidad de mantener una vida digna”.
En su opinión, “las ayudas puntuales son asistencialismo y caridad y no hacen más que cronificar las situaciones pobreza que ya existen; no transforman la realidad en absoluto”. Por ello, ha apostado por realizar un “trabajo integral desde los servicios sociales, junto con el área de educación, de empleo”, entre otros para “proporcionar ayudas estables en el tiempo, recursos formativos, propuestas de inserción laboral, becas de transporte, comedor o libros”.
“Los menores y sus familias deben tener acceso a los recursos adecuados, y eso lo garantizan las políticas sociales no el buenismo y la propaganda”, ha sentenciado la concejala del grupo municipal socialista.