La reina Letizia ha acompañado en todo pomento al rey Felipe VI, durante los actos protocolarios de esta mañana se le han visto muchos actos afectivos hacia su marido y sus hijas.
Nada más salir le hacía una caricia en el coche que les llevaría al Congreso, en cuyas escaleras además le ha dado un beso. En cuanto a las infantas a estado atendidas en todo momento por su madre, mientras han estado juntas, que no dejaba de mirarlas.
En cuanto a la indumentaria la reina Letizia ha decidido en esta ocasión optar el blanco por un conjunto de vestido y abrigo. Sobrio, elegante y discreto.
Un diseño que ha hecho Felipe Varela, su modisto habitual.Los zapatos, en un discreto tono empolvado, son de la casa Magrit, que suele calzar a esposa de don Felipe en múltiples ocasiones.
El blanco fue el color elegido el día que Don Felipe anunció su compromiso y también en el acto de pedida de mano. Ese día, Doña Letizia, llevó un traje de chaqueta y pantalón en color blanco de Giorgio Armani.
Sencillo y discreto
El abrigo de la reina Letizia para la proclamación de Felipe VI, va muy estructurado, tiene un patrón sencillo y una línea muy limpia y definida. Destaca el bordado en degradé que se ha incorporado en la parte superior, con flores doradas y cuentas de cristal, rubíes, amatista y paillettes en blanco, plata, ocre y rojo.
Lleva bolsillos exteriores pero no lleva botones a la vista. El peinado que ha escogido está en sintonía con el vestuario: cabello suelto, liso y peinado hacia atrás con una trenza para dejar despejada la cara.
Lo que más ha llamado la atención ha sido el bolso, quizá demasiado grande, en un tono arena suave. Las joyas, igual de discretas que el conjunto, se han limitado a unos pendientes pequeños y el lazo de la Gran Cruz de la Orden de Carlos III, de la que es Dama desde su enlace en 2004.
Si Doña Letizia hubiera llevado un vestido largo tendría que haber cambiado el lazo por la banda.
Colores suaves