Moncho Borrajo pone en escena, desde hoy miércoles y hasta el próximo 7 de diciembre en el Teatro Talia de Valencia, el espectáculo ‘Yo, Quevedo’ donde el actor se materializa en el mordaz autor del Siglo de Oro para sacar punta a la realidad y a sus pícaros actuales: “No olvidemos que ahora tenemos a Rinconete, Cortadillo y Nicolás”, dijo en rueda de prensa.
El actor vuelve a jugar con la historia, tras su anterior trabajo en ‘Golfus Hispanicus’, y que piensa cerrar, a modo de trilogía con ‘Moncho Panza’ el próximo año 2015.
Tras cuatro décadas de trayectoria encima de los escenarios, el veterano actor se mete en la piel, y los versos, del autor de ‘El Buscón’, con el que comparte su capacidad de crítica “valiente, de frente” al poder y la corrupción.
Preguntado por los paralelismos entre ambas épocas, Borrajo comentó que el montaje va cambiando, actualizándose y enriqueciéndose con los cambios sociales “se estrenó con Juan Carlos I como rey y ahora el monarca es Felipe VI y la Rotenmeyer (en alusión a la reina Letizia) y las aportaciones de los espectadores que siempre dicen cosas”, comentó.
En esta nueva producción teatral, el artista gallego se ha rodeado de importantes colaboradores, como la actriz Lucía Bravo y el humorista Carlos Latre, que pone la voz a algunos personajes. Cuenta, además, con una “sencilla pero resultona” escenografía y una música original, compuesta y grabada para esta función.
Durante la presentación, Moncho Borrajo ha rememorado sus inicios artísticos en Valencia y ha evocado la intensa vida cultural, “una cultureta molt bona”, dijo en valenciano.
En este punto, comentó que “ahora es más difícil provocar que antes, ya que la gente está más acostumbrada” a cosas que él introdujo en sus actuaciones, como el uso de tacos “para molestar” o meterse entre el público con un micro.
No obstante, 40 años después, el intérprete conserva su espíritu crítico, aunque ha reconocido que es “un consentido lo que es muy triste. La política me consiente porque actúo en salas pequeñas, no en la televisión”, concluyó.
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