Consultor en GB Consultores Financieros y Tributarios
En un día lleno de recortes y otros ajustes, me viene a la cabeza el personaje histórico que representaba Gaspar de Guzmán y Pimentel Ribera y Velasco de Tovar, conocido entre acólitos y subordinados como conde-duque de Olivares, valido del rey Felipe IV, y que nos dejó en nuestra tierra con frases como “Tenemos a los valencianos por más muelles que los catalanes y portugueses”
Siendo pues que nuestra tierra ya se consideraba como tierra de persona flexibles, moldeables y por ende, sumisa, permitidme que opine, si bien someramente, sobre la Caja de Ahorros de Alicante y Murcia, y sobre todo, de lo que pasó el pasado lunes.
El pasado lunes 9 se celebró la junta general por la cual se disolvía la caja, ahora CAM, y técnicamente, de acuerdo con los acuerdos tomados, en situación de liquidación, por tanto, ya no es CAM-Sabadell, es un cadáver financiero, de cuerpo presente, y en vistas de ser embalsamado y portado al mausoleo.
No es cuestión mía ni hacer causa contra los causantes ni repartir responsabilidades, para ello están nuestros órganos jurisdiccionales, pero claro, posteriormente me veo informes como el siguiente, y claro, me salen sendos sarpullidos y quiebra mi paz intelectual en más de un caso:
Informe con Relevancia Prudencial 2011 CAM (De fecha 17 de abril de 2012)
En menos de 90 días, se ha acordado la liquidación de esta entidad financiera a precio de liquidación cero, lo que supone fondos propios negativos o nulos (por lo que, del informe del link, no entiendo desde la página 18, en adelante)….pero, el núcleo de mi comentario no es el si es correcta o no la valoración o si las preferentes, las subordinadas y demás productos complejos han sido la forma efectiva de uno de los engaños lo suficientemente poderosos para efectuar disposiciones patrimoniales a favor de terceros, que, no es otra cosa que la descripción del tipo efectivo de la estafa, sí, del fraude global y sistemático que espero los tribunales defiendan a los perjudicados y busquen responsabilidades en aquellos que las tienen.
Por ende, independientemente de la CAM, del Banco de Valencia, de Bancaja y los demás asuntos de nuestro día a día, me NIEGO que hoy, con el recorte anunciado en la cámara baja por el Presidente del Gobierno, que se olvide que un texto que reza en la página de la CAM “135 años de una buena causa. Durante este tiempo hemos compartido tus ilusiones y proyectos, ayudándoles siempre a hacerlos realidad. Gracias por confiar en nosotros” sea lo único que quede en el haber social de nuestra tierra, de nuestro país.
No es de recibo que en nuestra tierra nos quedemos sin entidades financieras de referencia, no es de recibo que sectores desprotegidos vean mermados sus derechos, no es de recibo el ataque fundamental al patrimonio del sujeto ordinario, vasallo o siervo, me resulta INDISTINTO la época, el tirano o el que lo apoye.
Nuestra tierra nunca ha sido de personas muelles, puedo aceptar que se quieran privatizar las ganancias o puede que esté en enorme y profundo desacuerdo con la socialización de las pérdidas, pero lo que más me genera repulsa y carcoma emocional es el poder pensar que ua noticia como la pérdida de una institución tan importante como la CAM se disuelva cual azucarillo informativo en tres días.
No señores, no, lo que está pasando es muy grave, y no es una recesión sólo económica, si no de valores y de moralidad. Y más de uno, se sabe responsable y es tan culpable tanto él, que no dimite ni carga con su responsabilidad, como aquél que permite, que siga allá en donde está.