Valencia Noticias | Agencias.- Tres periodistas españoles se encuentran desaparecidos en Siria, según ha confirmado el Gobierno y la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), que asegura que los reporteros Antonio Pampliega, José Manuel López y Ángel Sastre entraron en Siria el día 10 de julio desde el sur de Turquía y se desconoce su paradero desde el 12, por lo que se teme pueda tratarse de un secuestro, según la web de rtve.
Los reporteros ‘freelance’ estaban trabajando en la ciudad de Alepo, según informó Europa Press, aunque Exteriores no confirma la ubicación de los desaparecidos.
Por su parte, el director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, Rami Abderrahman, ha dicho a Efe que la última ocasión en que fueron vistos fue en una furgoneta blanca, junto a su traductor sirio, en la zona de Al Maadi, en la parte vieja de Alepo, el 11 de julio. Según Abderrahman, su vehículo fue interceptado por un grupo armado desconocido que llevaba ropas al estilo afgano, antes de su desaparición.
Mientras, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha afirmado que el Gobierno empleará “todas las medidas” a su alcance para tratar de encontrar y, si fuera necesario, liberar a los tres periodistas, cuyo posible secuestro tildó de “muy mala noticia”.
Catalá ha puntualizado que “primero hay que saber qué ha pasado, quién tiene retenidos a estos periodistas, con qué objetivo y si los posibles captores buscan un rescate”. Ha añadido que también “habrá que contactar con el Gobierno de Siria y con su Ejército o sus Fuerzas de Seguridad y ofrecerles la máxima colaboración para intentar devolverles la libertad a estas tres personas”.
Desde la FAPE han mostrado su “preocupación” ya que, según ha reconocido su presidenta, Elsa González, en una entrevista en el Canal 24horas, es innegable que “el peligro es enorme” al tratarse de una zona en guerra.
Las familias de los periodistas han pedido “paciencia pero, sobre todo, respeto” a los allegados de los reporteros. En un comunicado conjunto, las familias advierten de que no harán declaraciones públicas y piden “la mayor discreción posible tan necesaria en momentos como estos”.
Tanto la FAPE como la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) han manifestado su esperanza de que las autoridades españolas localicen sanos y salvos a los periodistas españoles.
La zona en la que los periodistas estaban trabajando no es una zona controlada por el Estado Islámico, sino por la rama de Al Qaeda en Siria, el frente Al Nusra, según especialistas.
Los periodistas españoles Antonio Pampliega y Angel Sastre y el fotoperiodista José Manuel López trabajan como freelance para diversos medios.
Pampliega es colaborador de varios medios y, entre otros, es autor del blog ‘Un Mundo en Guerra’ donde detalla que está especializado en la cobertura de conflictos bélicos desde el año 2008.
Mientras, Sastre también ha colaborado con varios medios y ha recorrido diversas zonas de conflicto en América Latina y Oriente Medio.
López es un fotoperiodista galardonado en varios certámenes internacionales por su trabajo en zonas de conflicto.
En marzo de este año fueron liberados los periodistas españoles Javier Espinosa y Ricardo García Vilanova tras 194 días de secuestro, también en Siria.
El reportero de El Mundo Espinosa y el fotógrafo freelance Ricardo García Vilanova fueron secuestrados en la provincia de Raqqa, muy cerca de Turquía, cuando trataban de abandonar el país tras dos semanas informando sobre las consecuencias de la guerra civil Siria.
El corresponsal de ‘El Periódico de Catalunya’ Marc Marginedas también fue liberado después de casi 6 meses de secuestro también por el EI en la ciudad de Hama, en el centro de Siria.
El fotógrafo vasco Andoni Lubaki permaneció 12 horas retenido por grupos rebeldes en Alepo, donde trabajaba como freelance.
Un total de 27 periodistas fueron secuestrados en Siria en 2014, de los que una veintena continuaban retenidos a finales de año, en su mayoría informadores locales que se encuentran en poder de los grupos armados, según el Informe Anual 2014 de Reporteros Sin Fronteras (RSF), que señala a Siria como el país más peligroso para ejercer el periodismo.
El año pasado, con la publicación de su Informe Anual, RSF denunció que el EI había puesto en marcha en Siria una táctica de secuestros y decapitaciones de periodistas, cuyo punto álgido fue la ejecución, grabada en vídeo y difundida por las redes sociales e Internet, de los reporteros estadounidenses James Foley y Steven Sotloff.