Desde que se inició el programa de DGP, a finales de 2008, se han llevado a cabo 85 ciclos con transferencia de embriones y 20 embarazos. De estos 20 embarazos, se han registrado hasta el momento un total de once nacimientos, encontrándose en la actualidad cinco gestaciones en curso.
Así, son los servicios de Ginecología y Reproducción Humana Asistida los responsables de su aplicación, en colaboración con la Unidad de Genética y los servicios de Obstetricia y Pediatría de este mismo centro.
En lo que llevamos de año, el Servicio de Reproducción del Hospital La Fe ha realizado 21 transferencias de embriones dentro del programa de DGP, de las cuales conocen los resultados en 16 de ellas y han conseguido 5 embarazos ( un 25% de los casos).
En La Fe, en estos momentos, se realizan técnicas de Diagnóstico Genético Preimplantacional para las siguientes enfermedades:
– Fibrosis quística
– Distrofia Miotónica de Steinert
– Enfermedad de Huntington
– Enfermedad de Charcot-Marie-Tooth tipo 1A
– Osteogénesis imperfecta
– Síndrome de Marfan
– Neurofibromatosis tipo I
– Enfermedades de herencia ligada al sexo (Hemofilia, Distrofia muscular de Duchene, inmunodeficiencias severas…)
– Padres portadores de alteraciones cromosómicas numéricas o estructurales.
Diagnóstico Genético Preimplantacional
El DGP permite implantar en el útero materno embriones sanos o cromosómicamente normales en parejas portadoras de alteraciones genéticas graves, cuyos hijos pueden tener riesgo de heredarlas. Se trata de diagnosticar de forma precoz alteraciones cromosómicas y enfermedades hereditarias graves.
Para ello, la pareja pasa por una consulta de consejo genético y reproductivo donde se valora la técnica más apropiada para cada enfermedad. Posteriormente se realiza un estudio personalizado de reproducción y de la alteración genética en cuestión cuyo resultado no debe contraindicar una técnica de Reproducción Asistida. Este estudio deberá mostrar asimismo una reserva ovárica suficiente en la mujer y un número suficiente de espermatozoides en el hombre, de acuerdo con la Ley 14/2006 sobre Técnicas de Reproducción Humana Asistida.
Una vez se dispone de estos resultados, la pareja pasa a someterse a tratamientos de fecundación in vitro y se lleva a cabo una biopsia de las células embrionarias (blastómeros) que sirve para determinar si hay embriones sanos que se puedan transferir al útero materno.
Es importante señalar también que en muchos casos para poder utilizar esta técnica se debe contar con la autorización de Comisión Nacional de Reproducción Humana Asistida (CNRHA) del Ministerio de Sanidad.
Asimismo, desde el Servicio de Reproducción de La Fe destacan que no todas las enfermedades que tienen una base genética son susceptibles de la aplicación de un DGP.
“En ocasiones, no es posible detectar la mutación responsable, otras veces no existen marcadores informativos para realizar el estudio genético en una blastómera (célula embrionaria) aislada, y es necesario disponer del número suficiente de embriones evolutivos de suficiente calidad para efectuar el diagnóstico” señala la Dra. Ana Monzó, responsable de este tratamiento en la Unidad de Reproducción Humana Asistida del Hospital La Fe.
Es decir- añade Monzó, “el diagnóstico tiene que ser posible, la fiabilidad del procedimiento debe ser alta, y debe constatarse una reserva ovárica y número de espermatozoides suficientes, para considerar que existen probabilidades de éxito, con un balance riesgo-beneficio-coste lo más óptimo posible”. En este sentido es muy importante la edad de la mujer y su reserva ovárica.
El Hospital La Fe dispone de una consulta específica para tratar este tipo de problemas y en el caso de no poder realizar DGP de una enfermedad concreta o a una pareja determinada, se les facilita el consejo genético y reproductivo.
VLC Ciudad / Redacción