El Péndulo | Redacción.– Tras la despedida al turrón y los mazapanes, acabadas las fiestas navideñas toca decir adiós a dos propuestas que han sido protagonistas estas fiestas en Sala Russafa.
El centro cultural programa este fin de semana las tres últimas funciones de ‘Buscando al Mago de Oz (Oh, EurOZpa!)’ una comedia musical para adultos que parte del clásico de la literatura infantil creado por L. Frank Baum para realizar una ácida crítica a la política europea.
Chema Cardeña escribe y dirige este alocado montaje, segunda parte de la trilogía arrancada con ‘Alicia en Wonderland’ y que culminará la próxima temporada con una adaptación también musical y para adultos de ‘El Principito’.
Siguiendo el espíritu de la trilogía, ‘Buscando al Mago de Oz (Oh, EurOZpa!)’ parte de un cuento creado para niños para ofrecer una lúcida mirada a nuestra sociedad; en este caso, a la hipocresía del espíritu europeísta y a temas candentes como las ideologías, la migración, los refugiados y las identidades nacionales. Todo ello a un ritmo vertiginoso y a golpe de carcajada, con la historia de los representantes de cuatro países, España, Portugal, Grecia e Italia (con grandes similitudes con los populares Dorothy, El Hombre de Hojalata, El León Cobarde y El Espantapájaros) que, tras un terrible tifón/crisis emprenden un viaje a Ciudad Esmeralda para pedir al Mago de Oz que les rescate.
Situaciones absurdas, gags visuales, humor corrosivo y una galería de deslenguados personajes, como la Bruja Mala del Este y la del Norte, funcionarias europeas expertas en burocracia y adictas a los artículos de lujo. O el Hada Buena, una germana sospechosamente masculina y sólo dispuesta a ayudar si se cumplen sus condiciones.
Rosa López, Iria Márquez, Jaime Vicedo, Darío Torrent, Juan Carlos Garés, Eva Lezcano, José Doménech, Juanjo Benavent y el propio Cardeña forman el elenco de este espectáculo que completan los músicos José Montoro, Johnny B. Zero y David Campillos, integrantes de La Banda de los Monos Voladores, que interpreta en directo versiones de The Who, ABBA, The Beattles o E.L.O, en una dinámica puesta en escena que incluye hasta un mini festival de Eurovisión. Un desternillante viaje al otro lado del arcoíris que ha agotado las localidades en muchas de sus representaciones y que se despide tras haber cosechado excelentes críticas.
‘SomShow 2.0’, el homenaje al cabaret valenciano, alza por última vez el telón
Este sábado 9 de enero, Pascual Peris, Annie Tébar, Carmen Cardo y Luis Llamas sacarán por última vez las plumas, lentejuelas, corsés y medias de rejilla del camerino de Sala Russafa para representar la última función de ‘SomShow 2.0’ Tras dos meses en cartel, se despide este espectáculo, nueva versión de ‘ShomShow’, un homenaje a la escena del music-hall valenciano que triunfaba en los 80’, convirtiendo a Valencia en cuna del Cabaret que la Movida puso de moda.
Treinta años más tarde y mofándose de sobrepasar el medio siglo, cuatro de los integrantes de aquel fenómeno de la noche valenciana se reunieron para reivindicar el humor socarrón, el erotismo, la fantasía y el carácter genuinamente valenciano de unos espectáculos reflejo e impulso de la liberación tras años de dictadura.
Tras el éxito de la temporada pasada, en noviembre volvieron invitando a uno de los iconos indiscutibles de aquella escena, el transformista Antonio Campos, famoso por su personaje La Margot, a la que admiraban entre otros muchos artistas del momento, Sara Montiel.
Con llenos absolutos y el apoyo del público, estos cinco artistas han realizado un recorrido por los temas, los estilos, las canciones que triunfaban en el momento, sin olvidar los guiños a la situación actual y al inevitable paso del tiempo. Maquillajes extravagantes, más de 40 piezas de vestuario, números musicales, humor sin complejos ni pelos en la lengua y complicidad con los espectadores son las claves de este espectáculo, que establece un puente temporal con una Valencia con muchos paralelismos con la actual, que empezaba a abrirse a un tiempo nuevo y en la que lo mejor que podía (y que puede) hacer el cabaret es invitar a soñar.