Aproximadamente en el 5% de los cánceres existe un componente familiar hereditario y la exposición a agentes tóxicos en el trabajo puede estar detrás de un 10% del total. El resto, del 80 al 90%, estaría relacionado con el estilo de vida.
1. No fumes
Y mantén tu casa sin humo de tabaco. El humo del cigarrillo que se consume sin aspirar tiene 4 veces más componentes carcinógenos que el inhalado y los no fumadores que conviven en el mismo recinto están igualmente expuestos a estos carcinógenos.
2. Mantén la línea
La obesidad se asocia al aumento del riesgo de cáncer de mama, colon y recto, esófago, páncreas, endometrio o riñón, entre otros.
3. Muévete
Realizar con frecuencia actividad física moderada previene entre un 30 y un 50% la aparición de tumores cancerosos.
4. Come bien
Además de llevar una dieta saludable rica en cereales, legumbres, verduras y frutas y reducir el consumo de alimentos ricos en calorías, azúcar y grasa, así como las bebidas azucaradas, recuerda que los alimentos carbonizados (a la parrilla, tostados) contienen productos cancerígenos conocidos como hidrocarburos aromáticos policíclicos. Además, la cocción y posterior enfriamiento lento de comidas que mezclan vegetales y carnes (guisos y potajes) genera la aparición de nitrosaminas, que son carcinógenas.
5. Alcohol, poco y de vez en cuando
El consumo de alcohol produce cáncer hepático, sobre todo cuando hay hepatitis y cirrosis, y representa un agente carcinógeno de primer orden en el cáncer orofaríngeo y esofágico.
6. Ojo con el sol
Uno de cada tres nuevos tumores que se diagnostican es cáncer de piel. La exposición a los rayos ultravioleta solares es un factor de cáncer de piel y melanoma, por lo que se recomienda limitar la exposición al sol y usar factores de protección elevados.
7. Aléjate de los malos humos
El humo producido por la combustión de material orgánico es cancerígeno, y la contaminación más importante se produce por el hábito de fumar y por la utilización del carbón en la cocción de alimentos y en la calefacción. Además, en las ciudades se une la concentración de partículas y agentes tóxicos de origen industrial, que aumentan los efectos de los carcinógenos. Se estima que cuando la concentración de este tipo de partículas en el aire aumenta un 1%, el riesgo de cáncer de pulmón aumenta un 14 por ciento.
8. Detección precoz: una responsabilidad de todos
Los programas de cribado mejoran de manera importante el pronóstico del cáncer que, a pesar de su incidencia, ha visto cómo crece su supervivencia y se reduce la mortalidad. Recuerda:
- Las mujeres deben realizarse una citología al año y, a partir de los 40 años deben participar en programas de cribado de cáncer de mama;
- Los hombres, a su vez, deben participar en cribados de cáncer de próstata a partir de los 40 años.
- Mujeres y hombres, deben participar en cribados de cáncer colorrectal a partir de los 50 años.
Dos consejos más
Uno para las mujeres: apuesta por la lactancia materna, que reduce el riesgo de cáncer de mama, y limita el uso de la terapia hormonal sustitutiva.
Y otro para los niños: asegúrate que tus hijos se vacunen contra la hepatitis B y contra el virus del papiloma humano.
¿Tienes dudas? Plantéalas en los comentarios y te responderemos gustosamente.
Esta información ha sido elaborada a partir de las reflexiones del doctor Antonio Brugarolas, Director de la Plataforma de Oncología del Hospital Quirónsalud Torrevieja (Alicante).