El Ayuntamiento de Valencia asumirá las obras de rehabilitación y de mejora del Polideportivo Rambleta que se iniciarán en marzo, valoradas en 150.000 euros, con el fin de que alguna empresa pueda optar a la explotación y gestión del centro, después de lo que dijo el concejal de Deportes y presidente de la Fundación Deportiva Municipal (FDM), Cristóbal Grau, a los vecinos del barrio de San Marcelino en una reunión que tuvo lugar este lunes por la noche.
A la asamblea informativa celebrada el lunes en los locales de la Asociación de Vecinos del barrio San Marcelino, además de Grau y a instancias de la entidad vecinal, también acudieron Luis Cervera, gerente de la FDM y el asesor Jesús Gracia.
El presidente de la FDM informó a los vecinos que tras no haber concurrido ninguna empresa a la licitación de la gestión del Polideportivo, inició contactos con una Federación Deportiva, de la que no quiso dar el nombre, para explorar la posibilidad de que se hiciera cargo de la gestión, “con resultado negativo”.
En estos momentos la FDM ha iniciado una ronda de contactos, que estima durarán “un par de semanas”, con tres empresas relacionadas con el sector de la gestión de instalaciones deportivas, para que por el procedimiento negociado, sin publicidad, intentar que alguna de ellas se interese por la gestión de Polideportivo, que en estos momentos se encuentra cerrado, “con unas condiciones más favorables que las publicada en el pliego de hace un mes”, según han apuntado desde el colectivo vecinal.
La diferencia es que las condiciones con las que se va a negociar con las citadas empresas son “sustancialmente mejores”, pues la obras de rehabilitación y mejora valoradas en unos 150.000 euros, que en la adjudicación pública iban a cargo de la empresa adjudicataria, “ahora, según Grau, irán a cargo de las arcas municipales”. Unas obras que ha prometido a los residentes que “se iniciarán a primeros de marzo”.
Los vecinos consiguieron el compromiso público de crear una Comisión Mixta FDM-A.VV para que una vez reabierto el Polideportivo se encargue de realizar controles periódicos de la instalaciones “para evitar que en lo sucesivo se produzca un deterioro tan acusado como el sufrido los últimos cuatro años en la Rambleta”.
VLCCiudad/Redacción