Arimaspos: Del escita “arima”(uno) y “spu” (ojo), o bien, del iranio “aspa” (caballo) y “arima” (salvaje) o “aryama” (el que ama) y “aspa” (caballo): según la mitología griega, losarimaspos constituían un pueblo fantástico que habitaba más allá de la tierra de los isedones, en el remoto noreste. Tenían un solo ojo y mantenían un continuo enfrenamiento con los grifos, guardianes de oro.
Hiperbórea y los hiperbóreosy los En la mitología griega, Hiperbórea era una región situada en las tierras septentrionales aún desconocidas, al norte de Tracia. Su nombre (en griego: (Υπερ βορεία) Hyper Boreas, ‘más allá del norte’)deriva precisamente de que se creía que el dios-viento Bóreas habitaba en Tracia, y los hiperbóreos, sus hijos, lo harían más al norte de este reino, en el país de Hiperbórea. Se les atribuían costumbres primitivas: Sileno, en una de sus fábulas, decía que fueron los primeros hombres en ser visitados por los habitantes de otro continente más allá del océano que, asustados por lo que se encontraron, regresaron a su país y no volvieron más.
De los hiperbóreos se decía que eran inmortales, además de ser descritos como Dioses. El dios Apolo conducía cada diecinueve años su carro hacia esta región para rejuvenecer. También se dice que aMedusa la desterraron a aquellas tierras.
Diversos fragmentos acerca de Pitágoras sostenían que él provenía de los hiperbóreos
Saga (mitología)En la mitología nórdica, Saga o Sága es una Ásynjur y tal vez sea otro nombre para Frigg. Dicho nombre puede significar“la que ve” o (menos probable) “anunciadora”. Se la menciona en la Grímnismál.
ANTONIO: Así es; porque si estuvieran allí cerca no tuviéramos tan poca noticia dellos como tenemos. Y a la verdad, a lo que yo entiendo, debe de haber muy gran cantidad de tierra desde los Montes a las gentes que él nombra por este nombre; pero no me maravillo de que en esto fuese, como dicen, a tiento, como lo hicieron todos los demás que en aquel tiempo escribieron; y así, Solino casi por estos mesmos términos trata esta materia, y aunque os parezca prolijidad no dejaré también de decir lo mesmo que él dice. Primero tratando de la tierra que está de la otra parte de los montes Rifeos, trae estas palabras hablando de los arimaspos:
«Encima de éstos y la altura Rifea hay una región cubierta con las continuas nubes y heladas, tiene muy grandes alturas y es una parte del mundo dañada y metida de la naturaleza en una nube de obscuridad en los escondrijos del Aquilón, por donde es rigurosísima, con el frío. Sola ésta entre todas las tierras no conoce todas las veces del tiempo ni del cielo, ni recibe otra cosa sino un invierno y frío sempiterno».
Y adelante hablando en otro capítulo de los montes Hiperbóreos, dice:
«Una fábula era de los hiperbóreos y un rumor, que si algunas cosas dellos vinieron a nuestros oídos con temeridad serían creídas; pero como autores muy aprobados y asaz suficientes lo aprueban, con semejantes autoridades ninguno lo tenga por falso, y así, hablaremos dellos. Habitan de la otra parte del Pthereophoron, el cual habemos oído decir que está de la otra parte del Aquilón. Es una gente muy bienaventurada, y algunos la quieren situar más en Asia que en Europa, y otros la pusieron en medio de un sol y otro, que es el Ocidente de los antípodas y el Oriente nuestro; lo cual contradice la razón, por haber un mar tan ancho que corre entre estas dos redondeces, y conforme a esto están en Europa.
Cerca de los cuales se cree que están los quicios del mundo y los postreros rodeos de las estrellas. Tienen sola una luz. No faltan algunos que quieren decir que no hay allí cada día sol como nosotros lo tenemos, sino que nace en el æquinoctio del invierno y que se pone en el del otoño; y así, es el día continuo de seis meses, y por otros seis, continua la noche. En el cielo hay gran clemencia y los vientos soplan muy saludablemente y ninguna cosa tienen dañosa.
Los bosques son sus casas; en el día danles mantenimientos los árboles; no saben qué cosa es discordia ni les inquietan enfermedades; para la inocencia todos tienen igual parecer; alléganse de buena voluntad a la muerte, y cuando tarda castíganla con matarse, y cuando están hartos de la vida, estando hartos de comer y beber se dejan caer de una muy alta peña en la profundidad del mar, y esta es entre ellos la más estimada sepultura. Dícese que por vírgines muy aprobadas inviaban a Apolo en Delos las primicias, y que por la maldad de los huéspe des no volvían sin ser corrompidas, y que por esta causa agora las ofrecen dentro de sus términos».
Y Pomponio Mela acabando de tratar de Sarmacia y comenzando lo de Scitia, dice:
«De ahí se siguen los confines de Asia, y si no es adonde hay perpetuo invierno e intolerable frío, habitan los pueblos de Scitia, los cuales casi todos se llaman sagas; y en la ribera de Asia los primeros son los hiperbóreos, sobre el Aquilón y los montes Rifeos, y están debajo del quicio de las estrellas, adonde el Sol no nace cada día, como a nosotros, sino, naciendo en el equinoctio del invierno, se pone en el del otoño, y por esto el día y la noche son continuos de seis meses.
Es tierra muy templada y por sí fértil; los habitadores, justísimos, y viven más larga edad y más bienaventuradamente que ningunos de los mortales».
LUIS: Paréceme que estos tres autores van diciendo una mesma cosa y casi por unas mesmas palabras, aunque difieren en que van siguiendo la habitación de estas gentes, uno por los montes Rifeos y el otro por los Hiperbóreos, y debe de haber buena distancia de los unos a los otros. Y no quiero que paséis adelante sin que primero me declaréis estos términos de Ptherophoron e Hiperbóreos, porque no los entendemos.