“El alcalde ha dispuesto en 2017 de más de 148 millones de saldo medio en la caja del Ayuntamiento mientras subía los impuestos a los valencianos e imploraba más dinero y capacidad de gasto al gobierno de España”
El portavoz del Grupo Popular, Eusebio Monzó, ha informado hoy que el saldo medio de Tesorería del Ayuntamiento de Valencia se ha situado a lo largo de todo el ejercicio del año 2017 en más de 148 millones de euros
En concreto, el saldo se eleva a 148.128.825,25€, de acuerdo con una respuesta oficial emitida por la concejalía de Hacienda ante una iniciativa presentada por el Grupo Popular ante la comisión informativa de Hacienda, Coordinación Jurídica, Inspección General y Desarrollo Económico Sostenible.
Esta cifra de saldo medio tan alta, ha declarado Monzó, “deja en evidencia el intento de manipulación del alcalde Joan Ribó cuando exige al Gobierno de España más financiación y mayor capacidad de gasto para el consistorio.”
El portavoz popular ha señalado que “el victimismo” del alcalde cuando reclama más dinero, “es falso,” y responde según ha añadido, “a la necesidad que tiene de tapar su incapacidad y la de sus socios de gobierno tripartito para gestionar el presupuesto de una ciudad como Valencia.”
Mientras Ribó dispone en caja de más de 148 millones de euros, ha manifestado Monzó, “ha subido los impuestos a los valencianos, la ciudad sigue sucia, los barrios están abandonados y sin nuevas dotaciones, y lo que es más grave, la atención social a las personas que más necesidades tienen está estancada, sin nuevos programas asistenciales, pese a que hemos conocido recientemente que el número de familias que viven en chabolas ha crecido.”
“Que Ribó y los concejales del tripartito son malos gestores es una evidencia que queda reflejada por ejemplo en los indicadores sobre el nivel de ejecución de las inversiones municipales, que en 2017 a duras penas llegarán al 50%, con casos tan sangrantes como que de la partida para promoción de vivienda pública no se hayan gastado ni un solo euro, o como cuando ahora comprobamos que además han dispuesto a lo largo de los 12 meses del pasado año de más de 148 millones de caja,” ha resaltado.
A continuación, ha advertido Monzó, que “los datos también dejan claro que la estrategia del ruido y la crítica permanente frente al Gobierno de España por la falta de recursos es sólo una forma de desviar la atención para que no se hable del fracaso de su gestión.”
“En lo que sí han demostrado ser muy eficaces es en otorgar subvenciones a sus amigos y en la adjudicación de contratos a dedo, porque hasta finales de 2017 ya habían dado más de 40 millones de euros a través de este procedimiento. Sería deseable que tuvieran la misma diligencia e interés en ejecutar las inversiones en los barrios que la que tienen en dar contratos a dedo,” ha concluido.
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