Los socialistas indican que el aumento del gasto se produce en partidas como la de energía eléctrica, donde crece en 10 millones de euros con respecto al año pasado
El concejal del grupo municipal socialista Pedro M. Sánchez ha denunciado hoy que los gastos corrientes del Ayuntamiento de Valencia “han aumentado más 30,5 millones de euros, mientras que las inversiones han bajado más de 12 millones”, según se desprende del estado de ejecución del presupuesto municipal a fecha de 31 de mayo. Unos datos que, en su opinión, “ponen en evidencia que la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y el Partido Popular incumplen los compromisos de austeridad”.
“O el equipo de gobierno no tiene la menor intención de poner orden en los gastos o es incapaz de aprobar una reducción real del gasto corriente”, ha declarado y ha indicado que el resultado es que, entre mayo de 2012 y de 2013, “el presupuesto para gastos corrientes se ha incrementado en 30,5 millones, lo que supone un 17 por ciento”.
Frente al incremento del gasto corriente, ha llamado la atención sobre “la reducción en las inversiones municipales, que pasan en el mismo periodo, de 69,5 a 57,1 millones de euros”. “Esto es una reducción de 12,4 millones que equivale a un descenso del 17,9 por ciento”, ha puntualizado.
Gastos de funcionamiento
Ha precisado que el incremento del gasto corriente “se concentra especialmente en tres partidas”. “En concreto –ha continuado– se trata de la correspondiente a la energía eléctrica, donde el gasto se incrementa en 10 millones de euros; Tráfico y Circulación, donde el gasto de conservación de semáforos, señalización y regulación del aparcamiento se incrementa en 6,2 millones y la contrata de la O.R.A. se encarece en 650.000 euros;y el área de responsabilidad patrimonial, con un aumento de 4,2 millones de euros”.
Además, ha destacado que los gastos en “estudios técnicos de la Policía Local se incrementan en 2,8 millones y los trabajos técnicos de Juventud suben 750.000 euros”. Otras tres partidas que elevan sus gastos corrientes en una cifra cercana a los 600.000 euros son “conservación de las dependencias municipales, conservación limpieza y mantenimiento de estaciones elevadoras y depuradoras y gastos de alcantarillado y equipos y reparaciones de procesos de información”.
A pesar de estos aumentos de gasto, Sánchez ha indicado que el presupuesto municipal “se mantiene en las mismas cifras que el del 2012” y “la compensación llega por la reducción de 5 millones en los gastos de personal y de 18 millones en el pago de gastos financieros”.
Sánchez ha recordado que los planes de austeridad de 2009 y 2010 “lejos de surtir efecto, aumentaron el gasto”. “El plan de austeridad del 2009 tenía que bajar el gasto — representación, alumbrado público, teléfonos, material de oficina, electricidad de las dependencias, agua y combustible– pero al final subieron un 42,44 por ciento y en 2010, un 6,96 por ciento”, ha detallado.
En 2011, el edil socialista ha asegurado que el equipo de Gobierno “directamente renunció a elaborar un plan propio para acogerse al Plan de Ajuste 2012-2022, de manera obligatoria con el objetivo de poder acceder al plan de pago a proveedores”.
Pedro M. Sánchez ha acusado a la alcaldesa de Valencia de “conducir por la senda del despilfarro y de una deuda descontrolada al ayuntamiento, gastando unos recursos fundamentales para hacer frente a la crisis”. “Barberá ni sabe ser austera en lo superfluo, ni invertir lo necesario para fomentar la actividad económica y la creación de empleo”, ha concluido.
VLC Ciudad / Redacción