Después del espectáculo que ha hecho disfrutar a todos los niños y niñas asistentes a la exaltación, llegaba el momento más esperado para las doce niñas que forman la corte de honor de Carla García, Fallera Mayor Infantil de Valencia.
Una a una las niñas recorrieron el corredor entre aplausos hasta llegar al escenario del Palacio de Congresos. En sus rostros se reflejaba ilusión y emoción para ver cumplido su sueño. Allí las recibía Pere Fuset, Presidente de Junta Central Fallera, para hacerlos imposición de la banda y la alegría que las acredita como Corte de Honor Infantil 2020.
Abrían el desfile Amelia Ricart y Carla Sahuquillo, las más pequeñas de la Corte lucían la seda “Monet” en color nácar. Esta seda 100% natural ha sido tejida por Compañía Valenciana de la Seda.
De inspiración centro europea, el dibujo se caracteriza por un centro floral rematado con una lazada en metal ore y acompañado de una orla vegetal. Confeccionada por doce colores diferentes de trama, combinados con el fondo aportando tonos vivos y alegres.
En color oliva, llegaba el momento de Blanca Chaparro y Gabriela López, que llenaban el escenario con sus trajes del siglo XIX confeccionados por la Joya Indumentaria y los zapatos de crisel.
Martina Bellver y Carla López, en tono coral, brillaban con las manteletas de hijas de Cramer Esteve, las delicadas puntillas de Santos Textil y las trabajadas bragas de Elvira Bella.
La siguiente pareja, Sara Rivas y Claudia Guillén, lucían el color Vasarely. Sus aderezos, de Arte Antiguo, los hacían lucir más si cabe. Realizado en oro de ley de 18 quilates.
Burdeos era el color elegido para que Cristina Marcos y María Ayora llegaron al escenario. Sus peines, obra de Más q peines, están inspiradas en un dibujo antiguo del siglo XIX.
La última pareja, Natalia Villanueva y Begoña Bonastre, llevaban un preciosos azul persa. El vestido lucía en el escenario gracias a alçaors personalizados de Ma-vino-Mar.
Fotos: Armando Romero
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