La ley electoral de Andalucía establece que las elecciones no pueden tener lugar entre el 1 de julio y el 31 de agosto. Esta restricción fue introducida en 1994 a través de una reforma de la Ley Electoral de Andalucía, impulsada por el entonces presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves.
Antes de esta reforma, las elecciones autonómicas en Andalucía solían celebrarse en los meses de junio o incluso mayo. Sin embargo, con el cambio legislativo, se buscó evitar convocar elecciones durante el periodo estival.
La modificación estableció que la fecha de la votación y la constitución del Parlamento debía ser “dentro de los veinticinco días siguientes al de la celebración de las elecciones”, excluyendo expresamente el periodo entre el 1 de julio y el 31 de agosto.
Desde entonces, marzo se convirtió en el mes preferido para convocar las elecciones autonómicas en Andalucía, aunque también ha habido convocatorias en junio. En total, marzo y junio concentran el 83% de las fechas de las elecciones andaluzas hasta la fecha.
Esta normativa tiene como objetivo evitar la celebración de elecciones en pleno verano, cuando muchas personas están de vacaciones y podría haber una menor participación electoral.
En el caso de las elecciones generales en España, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado la convocatoria para el 23 de julio. Sin embargo, en Andalucía, esta fecha no podría ser utilizada debido a la restricción establecida por la ley electoral autonómica.
En resumen, la ley electoral de Andalucía prohíbe la celebración de elecciones entre el 1 de julio y el 31 de agosto. Esta restricción fue introducida en 1994 para evitar convocar elecciones durante el periodo estival. Desde entonces, las elecciones autonómicas en Andalucía suelen celebrarse en marzo o junio.