Durante la festividad de Todos los Santos, los valencianos consumirán alrededor de 8.000 kilos de los dulces típicos de esta festividad: buñuelos de viento, huesos de santo y panellets, según las estimaciones del Gremio de Maestros Confiteros de Valencia -entidad decana por su antigüedad- y de sus pastelerías asociadas en la provincia.
Los huesos de santo y buñuelos de viento, elaboraciones que se extienden por toda España desde su capital serán, según las previsiones del Gremio, los dulces más demandados por los valencianos durante estas fiestas. Los huesos de santo son piezas cuyo tamaño oscila entre los 20 y 30 gramos, elaborados con mazapán cocido relleno de yema confitada, con un baño de glaseado (azúcar). Admiten diversos rellenos como las cremas de chocolate o el mazapán saborizado con diferentes opciones.
Por su parte los buñuelos de viento son pequeñas bolas de pasta Choux que, una vez elaboradas y rellenas de vainilla, chocolate o natas y trufas de tamaño pequeño, se sirven frías. A diferencia de los huesitos y los panellets, su conservación requiere frio
Sin embargo, son los Panellets -una elaboración con base de mazapán de Toledo exportada desde Cataluña a toda España- el dulce cuya demanda está experimentando un mayor crecimiento en Valencia, según las cifras del Gremio.
Los panellets son elaboraciones de tamaño pequeño -20 gramos cada pieza- y su característica principal es que el mazapán esta saborizado.
Sus formas son, por lo general redondas o ovaladas y los sabores más comunes son Fresa, café, limón, chocolate, vainilla, membrillo, etc.
También hay panellets recubiertos con frutos secos como los piñones, las almendras, las avellanas, el pistacho, etc. Se trata de elaboraciones que las pastelerías asociadas al Gremio mejoran cada año, sorprendiendo a sus clientes con nuevos sabores y en constante evolución.
El origen de los buñuelos se remonta al consumo en palacios y conventos durante la Edad Media, extendiéndose su elaboración más tarde a casas particulares y después a obradores de pastelería. En cuanto a los huesos de santo y los panellets, tienen un claro origen árabe, como la mayor parte de los dulces elaborados a base de almendras, miel y azúcar, en España.