El sindicato exige “defender, desde las instituciones europeas, la necesidad de pasar página a los recortes de servicios públicos”
El sindicato CSI·F reclama a los partidos políticos que defiendan, en la campaña al Parlamento Europeo, medidas que recuperen las condiciones laborales de los empleados públicos. La central sindical recuerda que en la Comunidad Valenciana realizan su labor unos 230.000 trabajadores de diferentes administraciones, que en los últimos años se han visto sometidos a continuos recortes y han sufrido un deterioro de sus condiciones laborales.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) ha planteado hoy a nivel nacional que las diferentes formaciones políticas incluyan medidas concretas para reparar la calidad de los servicios que reciben los ciudadanos y las condiciones laborales de los empleados públicos. El sindicato hace especial hincapié en aplicar esas propuestas a este colectivo en la Comunidad Valenciana, que ha padecido la amortización de puestos de trabajo, la supresión de la extra de 2012 o los efectos del denominado ´Decreto Vela´.
La central sindical señala que “la aplicación de políticas impuestas desde fuera de nuestras fronteras ha dado la espalda a los profesionales de las administraciones públicas. No se ha tenido en cuenta las necesidades, aspiraciones o voluntad del conjunto de los empleados públicos para mantener las señas de identidad de nuestro estado del bienestar”.
CSI·F apela a los partidos políticos, y especialmente a aquellos que tienen responsabilidades de gobierno, para que “sean conscientes de que el voto de los empleados públicos puede decantar la balanza electoral”. En este sentido, CSI·F, desde la independencia que constituye su seña de identidad, traslada las siguientes propuestas a los partidos políticos:
- Defender de manera nítida en las instituciones europeas la necesidad de pasar página a las políticas de recortes hacia las administraciones y servicios públicos impulsadas desde Bruselas. Los servicios públicos no han sido el origen de esta situación y por tanto no deben cargar con las consecuencias de los ajustes.
- Definir la estructura básica de las administraciones, con un plan de recursos humanos que detecte las necesidades en las plantillas y ofrecer garantías de estabilidad en el empleo.
- Establecer un catálogo de servicios públicos que única y exclusivamente deben ser prestados por empleados públicos.
- Blindar la profesionalidad de los empleados públicos, evaluar el desempeño y promover la carrera profesional.
- Establecer una hoja de ruta para compensar a los empleados públicos por los sacrificios impuestos (bajadas de sueldos, modificación unilateral de jornadas, despidos, descuentos por baja médica…) de manera paulatina a la recuperación económica que ya empieza a vislumbrar el Gobierno.
CSI·F, en definitiva, reivindica una apuesta real y políticas concretas para convertir a las administraciones en uno de los motores de crecimiento de la economía valenciana y de creación de empleo de calidad. Los empleados públicos reclaman su cuota en la recuperación del país, porque fueron los primeros en sufrir las consecuencias de la crisis y ahora no pueden ser los últimos en iniciar la recuperación.