Valencia Noticias | Agencias.- Amnistía Internacional (AI) asegura en un informe que quienes solicitan asilo en España “no son bienvenidos”, y que el sistema de acogida es “ineficaz, arbitrario y discriminatorio”. La organización humanitaria presenta en su último informe la preocupante situación en la que se encuentran las personas refugiadas en España y que en muchas ocasiones no tienen aseguradas una vida digna ni la posibilidad de integrarse e incluso “puede llevar a las personas a la indigencia a medio plazo”.
El asilo en España, para la organización, es un sistema de acogida poco acogedor e indica que España no es un país de acogida para aquellos que huyen de la guerra y la persecución. A través de entrevistas, testimonios y visitas a centros, Amnistía explica que el sistema no está funcionando. El tratamiento que reciben los solicitantes está lejos de ser el adecuado y muchos de ellos se ven abocados a la marginalidad y a la exclusión social, incluso una vez que obtienen la protección internacional.
“El sistema de acogida es ineficaz, está obsoleto, es discriminatorio y lleva a medio plazo a las personas refugiadas a la indigencia sin tener si quiera un numero alto con el que lidiar”, aseguró el director de Amnistía en España, Esteban Beltrán, para incidir en que las cifras de asilo en España son “ridículas” pues en 2015 “sólo 1.020 personas recibieron algún tipo de protección cuando había una lista de espera de más de 16.400 expedientes”.
Listas de espera, ayudas económicas inadecuadas, desprotección, falta de información sobre sus derechos y su situación legal en el país, menores sin acceso a la educación… Estos son algunos de los problemas que relata la organización en el texto, en el que subraya que, según la normativa nacional e internacional, los refugiados deben recibir prestaciones sociales específicas y ver satisfechas sus necesidades en condiciones de dignidad.
A pesar de que España es uno de los países de la Unión Europea con las cifras de solicitudes de asilo más bajas, la grave crisis en Oriente Medio y la guerra en Siria han puesto de manifiesto las carencias del sistema y la falta de voluntad política para arreglarlas, indica la ONG.
El reciente incremento de peticiones de asilo (más de un 90% con respecto a 2012) no se ha traducido en un aumento de los recursos. Por ejemplo, el personal de la Oficina de Asilo y Refugio no ha sido reforzada hasta finales de 2015, lo que ha conllevado grandes retrasos en las solicitudes y largas listas de espera.
Además de las demoras, Amnistía también denuncia un criterio desigual a la hora de atender peticiones. Bajo el llamado “criterio de prudencia”, las autoridades deciden no estudiar algunas solicitudes de protección internacional a la espera de que mejore la situación en el país de origen. Así, personas de Mali o Ucrania pueden ver su petición paralizada.