El oso marciano es el último ejemplo de las formaciones rocosas del Planeta Rojo que han desencadenado la tendencia humana a ver rasgos familiares en objetos aleatorios.
Los científicos que estudian la superficie de Marte han encontrado recientemente otra de las ya famosas pareidolias espaciales. En esta ocasión, nada más ni nada menos que una estructura parecida a la cara de un oso –o más bien un enorme osito de peluche– que sonríe.
La imagen, compartida el 25 de enero por la Universidad de Arizona (UA), fue lograda gracias a la cámara de la sonda Mars Reconnaissance Orbiter (MRO) de la NASA. Según la UA, esta foto de una extraña variedad de formaciones geológicas fue tomada el 12 de diciembre de 2022, mientras el MRO navegaba a unos 251 kilómetros por encima del Planeta Rojo.
Vista de la zona de Marte con el cráter en forma de oso.© NASA/JPL-Caltech/UArizona
A lo largo de los años hemos visto algunos cráteres locos en Marte gracias a la cámara HiRISE (High Resolution Imaging Science Experiment) de la sonda Mars Reconnaissance Orbiter, como la famosa cara sonriente o un elefante y un pájaro. Pero ¿qué es lo que ha podido crear ese extraño rasgo en el centro del cráter con forma de hocico de oso?
Según un comunicado publicado en el blog de la cámara HiRISE, se trata de una colina desintegrada en el centro de un antiguo cráter.
“Hay una colina con una estructura de colapso en forma de V (la nariz), dos cráteres (los ojos) y un patrón de fractura circular (la cabeza)”, explica Alfred McEwen, investigador principal de HiRISE.