Aumenta la participación sobre todo de colegios, ancianos y madres con bebés.
Valencia noticias | Redacción Más de 15.000 personas habían participado hasta las 13 horas de hoy en el Besamanos público a la Virgen de los Desamparados, que ha comenzado a las 7 de la mañana en la Basílica y que continuará durante todo el día de hoy hasta que concluya el paso del último de los devotos.
La participación de los fieles en estas seis primeras horas “ha sido constante y sin interrupción, con la plaza llena de gente, distribuida en las filas dispuestas con vallas en zig zag”, según ha indicado el presidente de la Hermandad de Seguidores de la Virgen, Juan Arturo Devís, quien ha añadido que “ha aumentado también la participación de niños respecto a otros años”
La imagen peregrina de la Virgen de los Desamparados luce un manto azul, donado ex profeso para esta ocasión por una familia valenciana, y será ubicada en el centro del altar mayor, a la entrada del presbiterio de la Basílica, a la misma altura que las personas que se acerquen a besarle la mano, según ha indicado la agencia AVAN el rector de la Basílica de la Virgen, Juan Bautista Antón.
Cada uno de los participantes recibirá una estampa nueva de la imagen original de la Virgen de los Desamparados, de la que se realizarán 30.000 copias, con una pequeña oración a la patrona en el reverso, con palabras del cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, ha precisado el rector.
De igual manera, el templo permanecerá abierto hasta que finalice el paso de los devotos, cuyo número el año pasado superó las 30.000 personas, y mientras dure el paso de los fieles la imagen original de la Virgen de los Desamparados que preside el altar mayor quedará girada hacia su camarín, donde tendrá lugar el culto ordinario durante todo el día.
Los turnos de visitas se efectúan por orden de llegada, con la mediación y atención de diversos miembros de la Hermandad de Seguidores de la Virgen y de la Corte de Honor de la Mare de Déu.
Igualmente, se ha instalado una paraeta a la salida de la Basílica en la que se ofrecerán gorras, rosarios y abanicos, entre otros artículos, con la imagen de la Virgen para que puedan ser adquiridas por los fieles, según fuentes de la Hermandad de Seguidores de la Virgen, que coordina el paso de los fieles.
Los donativos que se recauden de la venta de estos productosirán destinados a los pisos de acogida a personas con enfermedad mental que gestiona la Fundación Mare de Déu dels Innocents i Desamparats, MAIDES. También, la Fundación MAIDES pondrá a la venta, durante el transcurso del Besamanos, pulseras solidarias y chapas para recaudar fondos a beneficio de la fundación y su labor de acogida y acompañamiento a personas con enfermedad mental.
Así, 35 niños de la Escuela Infantil Veo Veo de Torrente han acudido al besamanos “como cada año, para trasmitir la devoción a la Mare de Déu a los más pequeños, procedentes de familias muy devotas” según ha indicado a AVAN Amparo, responsable del centro, quien ha señalado que los niños, de 1 y 2 años de edad “saben perfectamente a dónde venimos y conocen a la Virgen de los Desamparados, a la que le dedican varias canciones”.
También han acudido por primera vez al besamanos cerca de 90 alumnos de entre 3 y 5 años de edad, del Colegio La Purísima del Grao de Valencia, de las religiosas Franciscanas de la Inmaculada, “con mucha ilusión y alegría de participar en este acto tan emotivo”, según indica Begoña, la responsable.
A lo largo de la mañana también han pasado ante la imagen de la Mare de Déu más de un centenar de ancianos acogidos por las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, de los cuales, cerca de 60 han sido desplazados en sillas de ruedas, acompañados por religiosas familiares y voluntarios, como Vicente que ha asegurado que “todos los años venimos a acompañar a los ancianos, que necesitan de nuestra ayuda, para que besen la mano de la patrona”.
Entre los ancianos se encuentra Carmen, de 80 años, que ha asistido por primera vez al Besamanos a la Virgen para “que me proteja, a mí y a toda mi familia” o María Amparo, de 86 años, que ha acudido todos los años a esta cita con la patrona a la que ruega “que haya paz en todo el mundo y no haya más guerras”.
También se han acercado hasta la Basílica numerosas madres junto a sus hijos, como Laura, que acude por primera vez con Víctor, de mes y medio, para “agradecerle que haya venido al mundo, tras muchos años deseándolo”, así como Laura, que participa desde hace muchos años en el besamanos, “primero con mis sobrinos, desde hace tres años con mi hija Marina” y hoy también con su bebé, Claudia, “para que siga cuidándola, porque ha estado muy malita”.
Como cada año, la Basílica ha habilitado, además, un acceso preferente para personas impedidas y familiares con bebés “con el fin de que eviten la larga cola de espera”. Este acceso se efectúa por una de las puertas laterales del templo recayente a la plaza de la Virgen mientras que la cola principal entra en la Basílica por la puerta de bronce.
La imagen procesional de la Virgen de los Desamparados está durante todo el día de hoy ubicada a la entrada del presbiterio de la Basílica en el centro del altar mayor, a la misma altura que las personas que se acerquen a besarle la mano. En esta ocasión, “la imagen de la Virgen viste un manto en color azul regalado por una familia valenciana”, según ha indicado a la agencia AVAN el rector de la Basílica, Juan Bautista Antón.
La Basílica de la Virgen permanecerá abierta hasta que finalice el paso de los devotos, cuyo número el año pasado superó las 30.000 personas. Por este motivo, mientras dure el paso de los fieles la imagen original de la Virgen de los Desamparados que preside el altar mayor quedará girada hacia su camarín, donde tendrá lugar el culto ordinario durante todo el día.