Los detenidos obligaban a los jóvenes a vender la droga amenazándolos con armas blancas y bates de béisbol
Los menores no recibían ninguna compensación ya que el grupo les obligaba a darles todo el dinero que generaban
Agentes de la Policía de la Generalitat-Mossos d’Esquadra de la Unidad de investigación de la comisaría de Horta-Guinardó han detenido a cinco hombres de entre 20 y 32 años, vecinos de Barcelona y de nacionalidad ecuatoriana, colombiana y venezolana como presuntos autores de delitos de amenazas, coacciones, defraudaciones de fluido eléctrico y delitos contra la salud pública.
Los hechos se remontan al 31 de enero cuando un joven de catorce, acompañado de su padre, denunció a los mozos que había sido amenazado y coaccionado por un grupo de cinco hombres con el objetivo de que vendiera drogas, en concreto marihuana.
El joven explicó que conocía el grupo desde hacía un tiempo pero que todo comenzó en diciembre de 2014 cuando le entregaron un paquete con marihuana con el propósito de que la vendiera. Cuando el joven intentó negarse le amenazaron con un bate de béisbol. En otras ocasiones que intentó dejarlo llegaron a cogerlo por el cuello ya intimidarle con cuchillos.
El menor informó que no era el único que estaba en esta situación y que conocía otro menor al que también le obligaban a vender marihuana en contra de su voluntad.Asimismo, aprovechó para explicarles que el lunes 2 de fiebre debía quedar con estas personas para entregarles el dinero de la venta de la droga.
Con esta información, los agentes montaron un dispositivo policial con el objetivo de detenerlos pero al encuentro, sólo vinieron dos hombres que quedaron detenidos. Los agentes localizaron en sus bolsillos tres bolsitas de marihuana similares a las que entregó el menor a la policía.
Los investigadores localizaron el segundo menor, de 15 años, que también era obligado a vender marihuana. El joven relató una situación similar a la del primer chico, explicando que la obligaban a vender amenazándole con bates de béisbol, y cuchillos hasta el punto de que llegó a temer por el su vida. Explicó también que el grupo movía grandes cantidades de marihuana que transportaban en bolsas deportivas o mochilas.
Los datos aportados por los dos jóvenes permitieron a los agentes identificar todos los miembros del grupo. Esto permitió que el 3 de febrero un agente localizara y identificara uno de los presuntos delincuentes el que terminó detenido.
El mismo día se hizo una entrada y registro en el domicilio de uno de los detenidos. En el interior del inmueble, los agentes localizaron una habitación habilitada para hacer crecer una plantación de marihuana, en concreto encontraron unos 25 macetas con plantas que se encontraban en un estado intermedio de crecimiento y 24 macetas con plantas recién cortar. También se encontraron abonos, un sistema de regadío interior, tierra, etc. Además, el grupo tenía manipulada la toma de la electricidad con el objetivo de no satisfacer la factura de la luz.
Dentro del domicilio había dos hombres que fueron detenidos al finalizar el registro.
Tras declarar en sede judicial, el juez decretó la libertad con cargos para dos de los detenidos y decretó una orden de alejamiento de sus víctimas a 2000 metros. Los otros tres detenidos, tras la detención, fueron puestos en libertad y están pendiente de declarar en sede judicial.
La investigación continúa abierta y no se descarta nuevas detenciones.