COCEMFE CV ha recibido en 2012 un total de 371 consultas sobre accesibilidad y eliminación de barreras arquitectónicas. La entidad de utilidad pública ha querido alertar sobre una tendencia que se ha visto acentuada en 2012, que es el aumento de personas con la movilidad reducida que se encuentran “prisioneras en sus viviendas” a causa de la existencia de barreras en sus edificios.
Por este motivo, la entidad de discapacidad ha tenido que crear un programa específico de atención, Mediamos Contigo, cuyo objetivo ha sido orientar e informar a las personas en situación de dependencia y sus familias sobre las soluciones que permitan la adaptación de las zonas comunes de los edificios en los que viven, principalmente, patios y zaguanes, desde una doble perspectiva: técnica y legislativa, con la colaboración de personal especializado como abogados, arquitectos y otros técnicos y empresas del sector.
El perfil de los afectados
Las personas afectadas por esta problemática, usuarias de sillas de ruedas u otras ayudas técnicas, en ocasiones llevan años sin poder salir de su casa, lo cual provoca trastornos psicológicos, un aceleramiento del deterioro físico y una nula relación con otras personas. Estas situaciones se dan habitualmente en edificios de vivienda antiguos que presentan escalones en los accesos, inexistencia de ascensor o soluciones de accesibilidad inadecuadas desde el punto de vista técnico, como pueden ser rampas con una excesiva pendiente.
Descenso de la accesibilidad en los presupuestos
La entidad ha querido destacar con preocupación que la Generalitat ha gastado únicamente el 45% de la línea de subvenciones y ayudas dirigida a los ayuntamientos de la Comunitat Valenciana y otras entidades para mejorar la accesibilidad en sus municipios, ya que la consignación inicial era de 216.000 euros y quedó en 99.000 tras sufrir una minoración.
Carlos Laguna, presidente de COCEMFE CV, ha mostrado su malestar ante esta situación: “Si a través de esta línea de ayudas se permite a los ayuntamientos subvencionar obras en la vía pública como rebajes de bordillo, mobiliario urbano adaptado o reformas de edificios municipales, no es comprensible que no se gaste todo el presupuesto aprobado. Además, la dotación económica es exigua para los 542 municipios existentes en la Comunitat Valenciana”. A lo que puntualiza: “¿Por qué no se han acogido a esta convocatoria el Ayuntamiento de Bonrepòs para adaptar la piscina municipal o el Ayuntamiento de Xàbia para adaptar sus calles, como nos han traslado algunas personas usuarias de sillas de ruedas?”.