Los resultados de las elecciones municipales de 2011 supusieron que cuatro grupos políticos entraron en el Ayuntamiento de Valencia. Esto se ha notado en el número de mociones presentadas: En el primer año de legislatura se han presentado 110 mociones, que más que duplican las 47 presentadas en 2009 y las 51 de 2010.
Esto también ha tenido consecuencias en el tiempo que duran los plenos del ayuntamiento, que se celebran el último viernes de cada mes. El Pleno suele comenzar a las 10.45 h, si bienlos concejales y concejalas del PP siempre llegan tarde porque antes celebran una Junta de Gobierno, y puede finalizar a las 15 o 16 h. Esto ha provocado que laBarberá haya pedido reiteradamente a la oposición que no presentamos tantas mociones porque eso hace alargar el Pleno.
Para la concejal de Compromís, la formación de izquierdas, valencianista y ecologista, Pilar Soriano, “pedir a los grupos de la oposición que no presentemos tantas mociones es pedir directamente que no trabajemos tanto. En estos momentos de crisis, lo que debemos hacer los representantes de la ciudadanía es trabajar más, no menos, para solucionar los problemas de la gente. Sabemos que esto le molesta a Barberá pero es lo que debemos hacer y más en estos momentos de gravísima crisis causada por las políticas del Partido Popular“.
Por esto,el PP impuso en la Junta de Portavoces del pasado 27 de junio una propuesta para que los grupos sólo pudieran presentar 3 mociones por Pleno. Esta medida atenta directamente contra la capacidad de los grupos de hacer propuestas en el Pleno y Compromís ya se mostró en contra de esta medida que fue aceptada por los demás grupos de la oposición, y que limitará a 99 las mociones al Pleno que se puedan presentar en un año (el PP no presenta mociones).
El artículo 48 del Reglamento Orgánico del Pleno establece que “Las sesiones ordinarias se harán con periodicidad mensual. La presidencia del Pleno podrá, no obstante, convocar una sesión extraordinaria con la finalidad de establecer una periodicidad inferior a la mensual para la realización de sesiones ordinarias”. Por todo esto, desde Compromís presentaremos una moción al próximo Pleno de julio para instar a la Alcaldesa a convocar un Pleno extraordinario cuyo único punto del orden del día sea establecer una periodicidad quincenal en las sesiones ordinarias del Pleno, con el fin de no limitar el número de mociones que los diferentes grupos políticos podamos presentar.
Pilar Soriano añade que “de esta manera se convocaría un Pleno a mitad de mes para tratar las mociones de los diferentes grupos, sin limitación, y un Pleno a final de mes para tratar todos los temas relativos a la actividad municipal excepto mociones de los grupos. Así se haría compatible nuestro derecho de querer trabajar por la ciudadanía con el derecho de los concejales del Partido Popular de querer acabar pronto el Pleno para poder irse a comer a una hora prudente”.
VLCCiudad/Redacción