Carmen Martínez Ayuso, de 85 años, fue desalojada el viernes de la vivienda de Madrid en la que pasó los últimos 50 años de su vida.
Las imágenes del desahucio, en las que la mujer llora ante los oficiales de la policía, conmovieron a un país ya acostumbrado la crisis económica, en la que el desempleo y los desalojos masivos -desde el 2007 estadísticas oficiales hablan de más de 500.000- son episodios cotidianos .
Martínez Ayuso fue obligada a abandonar su vivienda tras avalar un préstamo para su hijo con un particular por 40.000 euros. Ahora, que la deuda asciende a 77.000 euros, el acreedor se ha negado a aceptar que la mujer permaneciera en la vivienda a través de un mecanismo de alquiler social.
Sin embargo, la difusión del episodio ha impulsado al entrenador del equipo español Rayo Vallecano, Paco Jémez, a anunciar que tanto él como el cuerpo técnico y la plantilla del club se comprometerán a proveer a Carmen de una renta mensual para hacer frente al alquiler.
“Vamos a ayudar a esa señora que con 85 años perdió su casa. El club va a ayudar y también abriremos un canal de ayuda”, señaló Jémez en una rueda de prensa.
Por su parte, el grupo PAH (Plataforma de Afectados por la Hipoteca), se ha movilizado a la vivienda de Martínez Ayuso donde desde las primeras horas del martes la policía había cercado la zona. Allí, un grupo de militantes intentaron detener el desalojo, aunque no tuvieron éxito. Un fuerte operativo de la policía antidisturbios ha logrado que se ejecute la orden del juez.
A partir de la muerte hace siete años de su marido, la mujer vive con una pensión de 632 euros.